Bush elogió la economía y se preocupó por la región

El presidente Néstor Kirchner recibió ayer de su par de los Estados Unidos, George W. Bush, felicitaciones por la marcha de la economía argentina y las expectativas de "inversiones privadas", junto con la preocupación sobre la situación hemisférica, por el comportamiento político del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y la posibilidad de que el opositor y dirigente sindical Evo Morales acceda al poder en Bolivia.

En una conversación telefónica de unos 20 minutos, Bush tuvo palabras elogiosas respecto de la política económica de la Argentina tras el proceso de canje de deuda en default, y a las puertas de una definición sobre un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que en las últimas horas endureció su posición.

Bush se comunicó a las 9 con la Casa Rosada y en un diálogo "muy cordial", según los voceros oficiales, centró la atención en comentarios elogiosos sobre "el crecimiento económico" de la Argentina.

"Los capitales privados no tardarán en llegar al país", fue la reflexión de Bush ante los resultados económicos registrados en los últimos meses y que Kirchner se encargó de remarcarle.

A través de traductores, y con algunas frases salpicadas en castellano, Bush pasó de los elogios al análisis de la situación regional, en especial la crisis en Bolivia, la relación con Venezuela y, en menor medida, el desarrollo de la misión de paz en Haití.

Siempre según los voceros oficiales, Bush se mostró preocupado por los acontecimientos ocurridos en Bolivia, por lo que destacó el aporte de Kirchner, que -según dijo- "ayudó a la estabilidad democrática" en ese país.

El presidente de los Estados Unidos le dijo a Kirchner que "el consejo argentino es escuchado" por el resto de los países de América Latina, y marcó su preocupación, por segunda vez en menos de una semana, por la gestión de Chávez en Venezuela.

"Kirchner le trasmitió que mantendrá el diálogo con el gobierno democrático de Venezuela", precisaron las fuentes consultadas en la Casa Rosada.

La situación de Venezuela es un tema recurrente en la política del gobierno de Bush, que no evitó expresar su "preocupación" por la posibilidad de que Chávez adquiera miles de fusiles rusos, como lo señaló el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, en Brasilia.

LLAMADA ESTRATEGICA

La comunicación telefónica entre el presidente Kirchner y su par norteamericano fue cuidadosamente coordinada por el embajador de los Estados Unidos en la Argentina, Lino Gutiérrez, y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.

Lo llamativo de todo esto es la marginación de la Cancillería argentina de esta conversación que tuvo obviamente un fuerte peso político internacional, pese a que mañana Rafael Bielsa mantendrá una entrevista con la secretaria de Estado norteamericano Condoleeza Rice.

Este atajo de la embajada de Estados Unidos para llegar al Presidente rápidamente sin pasar por la Cancillería demuestra que el verdadero canciller es a su vez el jefe de Gabinete.

En última instancia, una de las características de la alta política es la anticipación: Condoleeza Rice se está perfilando como la gran candidata republicana a la presidencia para el 2007, lo que significa también "cierta política de seducción" hacia los países latinoamericanos.

Un aspecto que no se puede descartar es la influencia de los Estados Unidos en el G7 y por lo tanto en el FMI. Debe interpretarse entonces que la llamada cobra un sentido de profundo interés para la economía nacional.

Tampoco debe quedar fuera de cualquier análisis el hecho de que en noviembre Mar del Plata será escenario de la Cumbre de las Américas y Bush tiene comprometida su asistencia.