Avanzan en la prevención del cáncer de mama para pacientes de "alto riesgo"

La aparición de cáncer de mama en pacientes considerados de "alto riesgo" podría ser prevenida a partir de la administración de una droga ya utilizada para combatir esta patología, que sólo en la Argentina produce entre 15 mil y 18 mil casos nuevos cada año.

Así lo afirmó en el marco de las Jornadas Argentinas de Mastología, realizadas en nuestro país -donde participaron profesionales platenses-, el científico británico Michael Baum, quien además hizo una convocatoria a los médicos argentinos a participar de un estudio que se está realizando en todo el mundo, con 10 mil pacientes, para conocer en detalle los alcances de este tratamiento.

Esa nueva investigación, denominada IBIS II, compara la efectividad de una droga llamada anastrozol (usada para prevenir la recurrencia del cáncer en el seno del lado opuesto al afectado) contra placebo, para determinar sus efectos "en prevención de cáncer de mama en pacientes con alto riesgo".

"No podemos hacer este tipo de prevención en forma masiva, es decir tratar al 99 por ciento de las personas para prevenir en uno por ciento un cáncer de mama; por eso estudiamos sólo a aquellas pacientes que por sus características están altamente expuestas. Estoy aquí para invitar a médicos argentinos a participar de esta investigación", dijo el especialista británico.

De acuerdo con datos de la Fundación para la Investigación y Prevención del Cáncer (FUCA), en la Argentina se producen entre 15.000 y 18.000 nuevos casos de cáncer de mama por año. Según esas cifras, una de cada ocho mujeres se verá afectada por esta enfermedad.

Baum encabezó dos de los estudios más importantes que demostraron en todo el mundo los beneficios en el tratamiento de cáncer de mama de dos drogas: el tamoxifeno, que redujo en un 50 por ciento el riesgo de "recurrencia" de la enfermedad, y el anastrozol, que marcó una disminución adicional en la recurrencia de la enfermedad del 26 por ciento, "con menores efectos adversos".

La detección temprana del cáncer de mama aumenta las probabilidades de cura, y los tumores menores a 1 centímetro de diámetro se curan en el 95 por ciento de los casos.