15 de Noviembre de 2005 | 00:00
Finalmente, el jefe de Gobierno porteño Aníbal
Ibarra fue suspendido ayer en sus funciones luego de que la Sala Acusadora
de la Legislatura resolviera, en una sesión histórica, iniciarle
un juicio político por presunto mal desempeño de sus funciones
en torno a la tragedia de República Cromañón.
El enjuiciamiento del jefe de Gobierno -un hecho inédito en la
ciudad de Buenos Aires-, se resolvió por mayoría especial,
con 30 votos favorables, 7 en contra y 6 abstenciones, mientras que dos
diputados se encontraban ausentes.
Con esta resolución, Ibarra quedó inmediatamente suspendido,
sin goce de sueldo, por lo que asumirá la conducción del
Ejecutivo el vicejefe de Gobierno Jorge Telerman y en cuatro meses se
sabrá si es restituido o removido.
La sesión fue seguida con atención por familiares de las
víctimas de Cromañón en las inmediaciones de la Legislatura,
quienes festejaron con emoción el enjuiciamiento de Ibarra en medio
de abrazos y llantos por la angustia contenida.
No hubo familiares de las víctimas en el interior de la Legislatura
porque sólo estaban habilitados para ingresar al recinto diez de
ellos, pero prefirieron no hacerlo en rechazo de la restricción,
aunque dejaron carteles y fotos de los jóvenes fallecidos que hacían
sentir
De acuerdo con la Constitución porteña, ahora el proceso
continuará en la denominada Sala Juzgadora de la Legislatura, conformada
por 15 diputados y se necesitarán 10 votos para destituir al jefe
comunal.
Ese cuerpo tendrá un período de cuatro meses para expedirse
y en el medio habrá ocho legisladores de la Sala que cesarán
en sus funciones y serán reemplazados en el recambio legislativo
del próximo 10 de diciembre.
COMO VOTARON
La apertura del juicio político se aprobó con el apoyo del
macrismo, el ARI y la izquierda, en tanto que en líneas generales
el kirchnerismo se abstuvo y los diputados afines a Ibarra, más
otros independientes lo rechazaron.
Sin embargo, para obtener el número mínimo de 30 votos requeridos
fue clave el apoyo del legislador kirchnerista Juan "Chango"
Farías Gómez, quien respaldó el juicio político
y se diferenció del resto del bloque del Frente Para la Victoria,
que se abstuvo impugnando el proceso de investigación.
El otro voto que atrajo todas las miradas fue el de Eduardo Lorenzo "Borocotó",
quien en los últimos días concretó su pase al kirchnerismo
desde las filas macristas, aunque tal como se había comprometido
mantuvo su postura a favor del proceso a Ibarra.
La sesión comenzó a las 16:30 con 32 legisladores presentes,
que llegaron a ser 43 al momento de asistir a esta instancia clave de
la institucionalidad porteña, que se resolvió dos horas
y media después de manera inesperada hasta este lunes.
Los únicos ausentes fueron Roy Cortina (Partido Socialista) y Marta
Talotti (kirchnerista), quienes estaban fuera del país atendiendo
distintos compromisos.
Esta sesión se había iniciado el jueves pasado pero debió
pasar a un cuarto intermedio en medio de incidentes entre la Policía
y los familiares de las víctimas de Cromañón, quienes
tenían la presunción de que ese día sólo había
29 de los 30 votos necesarios.
RESOLVIO EL MUSICO
De hecho, ayer estuvieron tres de los cuatro ausentes en aquel debate,
Mirta Onega (independiente), Roberto Vázquez (UCR) y Farías
Gómez (FPV), aunque los dos primeros votaron en contra del juicio
político y fue el músico quien resolvió la suerte
de Ibarra, pese a que sus fundamentos fueron opuestos a los esbozados
por el resto de los impulsores del proceso.
Precisamente, la presencia del músico en la Legislatura, que había
sido puesta en duda de antemano, terminó por darle un golpe de
timón a un proceso que parecía juzgado hasta este lunes.
En el medio hubo nuevamente acusaciones cruzadas sobre especulación
política y un malhumor evidente en el bloque kirchnerista que no
logró sostener al jefe de Gobierno pese a los esfuerzos evidentes
que se hicieron en ese sentido.
A las 19 y luego de que varios diputados que eran mirados con desconfianza
por los familiares ratificaran su postura favorable al juicio, Ibarra
fue suspendido.
LA ASUNCION DE TELERMAN
Tras la suspensión de Ibarra, en tanto, el vicejefe Telerman reclamó
a los miembros del Gabinete que no renuncien con el objetivo de evitar
una descomposición de la gestión mientras se sustancia el
juicio político al jefe de Gobierno.
Así lo aseguraron fuentes de la administración porteña,
que además afirmaron que ninguno de los secretarios -equivalentes
a ministros- amagó hasta el momento con renunciar a su cargo.
A las 16:30, cuando comenzó el debate parlamentario la primera
línea del Gobierno porteño ya sabía que se reunirían
los 30 votos necesarios para aprobar la apertura del proceso de juicio
político y la suspensión de Ibarra como jefe del Ejecutivo.
En ese momento, cuando la noticia comenzaba a recorrer los despachos y
varios funcionarios evaluaban seriamente su continuidad, Telerman -un
peronista que fue embajador en Cuba durante el Gobierno de Carlos Menem
y que trabajó para la campaña de Eduardo Duhalde- convocó
a los secretarios y subsecretarios y les pidió "que no renuncien".
Con las filas cerradas, Ibarra y su Gabinete siguieron por televisión
el desarrollo de la sesión y cuando la apertura del proceso estuvo
votada, convocaron a una conferencia de prensa para ahuyentar los rumores
de su renuncia.
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