Sueños por cumplir

Con seis discos y una carrera exitosa... ¿Qué sueños le quedan por cumplir?

"Voy de a poco, sueño despierta por ahí. Ahora por ejemplo tengo el Rex. Y a mí me encantaría que esté lleno, que venga todo el mundo, que vengan los invitados. Es como más realista la cosa de soñar. Ya hacer un Rex está buenísimo. Pero después hay que llenarlo, hay que ponerle los condimentos al show... yo voy con esas cosas, soñando más despierta. Estoy tratando de estar en el presente agarrada como loca. Porque si no me pierdo cosas y no está bueno. Me doy cuenta de que el presente es el único tiempo real. Es ahora. Mañana ya no se sabe nada. Por más que uno planee y las cosas se vayan dando. Así que prefiero planear el hoy".

¿Qué características va a tener el show del Gran Rex?

"Vamos a hacerlo bastante similar al disco, porque la idea es presentarlo. Aunque siempre nos movemos. Igual no va a salir nunca. Además me encanta no hacer lo mismo que ya hice, aunque las canciones sean las mismas porque hay algunas que no puedo no tocarlas ni me interesa dejarlas de lado. Pero siempre movemos cosas, instrumentos, tempo. Movemos el escenario, vamos adelante, vamos atrás, toco la guitarra, toco la batería un poco. Siempre cosas pasan".

Además, sigue de gira por todo el país...

"Estamos trabajando muchísimo en el interior. De tocar paramos casi nada. A mí me gusta mucho. Vamos mucho a la Patagonia. Y las distancias son tremendas. Una de las últimas cosas que hicimos fue Maquinchao, 26 horas de ida y de vuelta y me encanta. A veces pienso 'Qué hago acá viajando seis horas en el ripio'. Y después cuando llego y voy a tocar se me pasa todo. Tengo una banda bárbara con muy buena energía, que acompaña un montón".