Si el procesamiento queda firme, Godoy será relevado

El jefe de la Armada, Jorge Godoy, deberá renunciar a su cargo en el caso de que el procesamiento en su contra por espionaje quede firme, aunque ello podría demandar varios meses.

Con el antecedente del desplazado jefe del Ejército Roberto Bendini y en línea con los procedimientos del Gobierno, Godoy continuará al frente de la fuerza hasta tanto el procesamiento agote las eventuales instancias de apelación, indicaron importantes fuentes oficiales a Noticias Argentinas.

Sin embargo este trámite será lento y además existe una puja de competencias entre la Justicia federal porteña y chubutense.

Sucede que la defensa de Godoy y de su segundo, el vicealmirante Benito Rótolo, pidió al juez federal Daniel Rafecas para que la causa que investiga la responsabilidad de las máximas autoridades militares en el caso de espionaje en la base militar de Trelew pase a la órbita de la Justicia porteña.

Argumentó que las firmas en las resoluciones que lo implican en la causa fueron hechas en Buenos Aires, pese a que el espionaje se desarrolló en Chubut.

Rafecas rechazó el pedido en primera instancia, pero los abogados defensores de los marinos apelaron ante la Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones de Capital Federal.

Los camaristas Martín Irurzun, Horacio Cattani y Eduardo Farah hicieron lugar al pedido y le ordenaron a Rafecas que pida a la Justicia de Chubut todos los antecedentes sobre la participación de Godoy y Rótolo en el espionaje.

El juez federal de Rawson, Hugo Sastre, y el fiscal Fernando Gélvez tenían hasta el próximo lunes para decidir si enviaban o no lo que Rafecas les pidió, pero al pedir el procesamiento a ambos marinos y avanzar allí con la causa se plantea ahora un conflicto de competencia, por lo que deberá ser la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia la que decida quién juzga.