Carrió criticó al gobierno y presagió "tiempos de llorar"

La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, comparó ayer al matrimonio Kirchner con el dictador rumano Ceausescu, dijo que existe "un gobierno de facto" en la Argentina y anticipó que viene "un tiempo de llorar" en el país.

Ante un salón colmado en un local que la Coalición Cívica platense inauguró en 1 y 65, Carrió trazó un duro balance de los 25 años del regreso de la democracia que se cumplieron ayer y afirmó que "si estuviese en una clase de Ciencias Políticas tendría que decir que volvimos a vivir en una dictadura porque el que nos gobierna no es el que fue elegido presidente sino un personaje por afuera del poder y ese personaje es Néstor Kirchner que ha impuesto un gobierno de facto".

En ese marco, Carrió redobló la apuesta y comparó al matrimonio Kirchner con el del fusilado dictador rumano Nicolae Ceausescu y su esposa Elena. "Acá ya tenemos a los Ceausescu", afirmó, para volver a presagiar tiempos difíciles para el país: "Viene un tiempo de llorar; llorar por la estafa y la mentira; llorar por los despidos generalizados, por la recesión profunda, por el campo sin rentabilidad y ante todo eso tenemos que prepararnos para cambiar las cosas y no tener miedo", agregó.

Carrió fue también dura con el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, sobre quien bromeó: "tiene cara de bueno, parece amoroso, pero le va a entregar el negocio del juego a Cristóbal López que es en definitiva Néstor Kirchner". Y añadió: "gobierna la provincia más rica del país, pero que es el corazón de la injusticia en el que reinan la droga, el abandono de la niñez, el abuso sexual y el hambre".

La líder de la CC agregó: "es que cuando un sector importante de la clase política está metido en el negocio del juego y de la droga lo que tenemos es delito, muertes e inseguridad en la provincia de Buenos Aires".

Consultada sobre las recientes conversaciones de Margarita Stolbizer, máxima dirigente de la CC en la Provincia, con intendentes bonaerenses que responden a Julio Cobos y con el propio vicepresidente de la Nación, Carrió mantuvo su postura crítica hacia el mendocino, al afirmar que "mientras sea vice de Cristina seguirá en una situación de entrampamiento".

No obstante, avaló las gestiones de Stolbizer ante el cobismo: "nuestro límite es la corrupción y por eso es bueno conversar con los no corruptos; además, yo confío plenamente en lo que hagan las autoridades de la Coalición Cívica provincial y nadie tiene que tener temores porque conflictos va a haber, pero lo que tenemos que lograr es construir una nueva Argentina con principios".

Consultada sobre si el macrismo estaba dentro o fuera de esos límites, Carrió contestó con un guiño y una frase final: "la respuesta en obvia", señaló.

Tras vaticinar que en el 2009 la Coalición Cívica obtendrá un resultado electoral "extraordinario", Carrió volvió a pegarle al gobierno nacional al afirmar que "Ortega y Gasset decía que somos una pared sin cimientos y eso es Cristina Kirchner, una pared sin cimientos".