Sólo en el primer cordón hubo más de 1.200 homicidios

Por SERGIO TOMARO

Mientras que especialistas en materia de seguridad consideran que el delito en la provincia de Buenos Aires se incrementó en un cien por ciento respecto al año pasado, organizaciones vecinales asentadas en el Gran Buenos Aires aseguran que sólo en el primer cordón del Conurbano se registró entre setiembre de 2007 e igual mes de 2008 un total de 1.273 asesinatos: es decir un promedio para ese conglomerado de más de tres homicidios por día.

Los datos aportados por ambas fuentes surgidos de la investigación y el apunte de casos ocurridos y que no necesariamente encuentran su correlato en información oficial, reflejan uno de los costados más inquietantes del flagelo de la inseguridad lanzado sobre el conurbano donde entre los distintos escenarios en los que se asienta el delito, en la zona sur es donde se multiplica el número de casos.

Sin ir más lejos, en una de las localidades del sur del conurbano los vecinos denunciaron a este diario que en una zona céntrica suelen registrarse raids delictivos por los que en un lapso de cinco o seis horas se producen en radios no mayores a las veinte cuadras, cadenas de delitos que incluyen arrebatos, asaltos y secuestros express.

Delictivamente fértil

Para el licenciado en seguridad Roberto Locles, esas modalidades de delito quedan cortas en la generalidad que ofrece el conurbano bonaerense donde, dijo, "también los robos de autos y los hechos consumados por piratas del asfalto están a la orden del día".

En su interpretación, si bien el Gran Buenos Aires en su conjunto es una zona fértil para el delito, hoy los distritos del sur son los que concentran mayor actividad y a juzgar por otro entendidos en la cuestión como Gabriel Lombardo de Vecinos en Alerta de Lomas del Mirador (VALOMI), con capacidad para 'exportar' hechos delictivos a otras regiones.

En diálogo con este medio, Locles sostuvo que en la actualidad es la zona sur del Gran Buenos Aires "donde se registra el mayor número de hechos delictivos" que, apuntó, "no necesariamente significa que se trasladen rápidamente a la estadística oficial".

Ciento por ciento inseguro

En ese punto Locles aseveró que "sin caer en la estadística oficial" y sobre la base de los registros "de diciembre a diciembre entre este año y el anterior, surge que el nivel de incremento de los hechos delictivos está en el orden del cien por ciento".

Basado en que la realidad de los hechos dan por tierra con el concepto de "sensación de inseguridad" defendido por las autoridades, Locles afirmó que el número de casos que se producen -denunciados o no- "revelan que en el conurbano el delito llegó a la cúspide".

"El delito aumenta porque los hechos que se producen superan por su cantidad a la estructura que puede ofrecer en el mejor de los casos la policía bonaerense" disparó el experto en seguridad para quien hasta el aporte del servicio de emergencia policial 911 "hoy está agotado".

Crímenes cotidianos

En otro orden Lombardo coincidió con el perfil de inseguridad trazado por Locles y en su caso, apoyado en datos provenientes del medio judicial y de organizaciones vecinales hermanadas con la que lidera en Lomas del Mirador, consideró que el delito en el conurbano "tuvo en el 2008 una expansión brutal".

Crítico de los foros que responden a los lineamientos políticos 'bajados' de los municipios a los que Locles, por su parte, define como estructuras vinculadas en "una obediencia debida" hacia la Gobernación, Lombardo reveló que "solamente en el primer cordón del conurbano se registraron entre setiembre y setiembre -en alusión del mismo mes de 2007 y 2008- un total de 1.273 asesinatos".

Los datos que alimentan la estadística del miembro de VALOMI provienen de distritos como Lomas de Zamora, La Matanza, Lanús, Quilmes, Tres de Febrero, Morón, Ituzaingó, Moreno y Merlo, entre otros, también lo llevan a afirmar que en el sur hoy es donde se concentra el foco más duro del delito que invade a todo el Gran Buenos Aires.

Incremento brutal

Y no sólo asocia ese punto cardinal con la inseguridad del Gran Buenos Aires. El sur de la Capital Federal también encuentra la movilidad delictiva y citó así el área del Parque de la Ciudad, "hoy -puntualizó- uno de los lugares elegidos para el pago de muchos secuestros".

"Es un sector que a los delincuentes les garantiza tránsito rápido para esas operaciones (el cobro de los rescates) y varias salidas directas de la ciudad" indicó Lombardo, aunque aclaró que su observación sobre el auge delictivo en la zona sur del conurbano no implica marcar una estigmatización como en la que incurrió el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, "cuando dijo que los delincuentes que azotaban su municipio provenían de La Matanza".

"No cabe la menor duda que el delito se incrementó brutalmente y tal como está encaminado parece que no tiene retorno" manifestó Lombardo, para quien los funcionarios que contradicen esos aspectos de la realidad y descalifican, "tienen una conducta maliciosa".