Nuevo freno vecinal al avance de la subestación

Una vez más los vecinos de Berazategui detuvieron el avance de las obras en la subestación de energía eléctrica Rigolleau, tras dialogar con autoridades policiales, y lograron que los operarios de EDESUR finalmente se retirasen.

Fue una nueva jornada cargada de tensión y nerviosismo. Es que desde temprano, la presencia de grúas para trasladar los autos de vecinos apostados sobre las veredas de las calles afectadas por la obra, sumado a una mayor presencia policial en el barrio, alertaron a los vecinos que confirmaban que trabajadores de EDESUR volverían esa noche para continuar con los trabajos desde la 145.

Isabel Palacios, vocera de los vecinos autoconvocados contra la subestación, manifestó: "Había informaciones que iban a venir operarios a la madrugada, vimos movimientos de custodia y grúas y entonces nos convocamos a la medianoche para frenar las obras. Se acercaron más de trescientos vecinos a esa hora de la noche, es un problema muy grave para el barrio y la gente está dispuesta a hacer todo para evitar que se construya".

"Cuando comenzamos con la reunión, se acercaron autoridades policiales para consultarnos cual era nuestra postura. Fuimos claros, seguir con el mismo reclamo que venimos sosteniendo desde hace cuatro años. El comisario nos entendió y nos dijo que no nos preocupáramos, que esa noche se levantaba el operativo y se retiraban los empleados".

Nueva postergación

Si bien estaba todo listo para avanzar con las obras, los vecinos lograron una vez más que sean postergadas. "Si EDESUR no avanzó, fue por la resistencia que venimos presentando los vecinos, porque ni a nivel estatal, ni judicial actuaron. Sin embargo, los vecinos seguimos rechazando la obra, porque nadie nos garantiza que esto no genere graves consecuencias en la salud de los vecinos, y hay antecedentes de muchas personas afectadas de otras zonas que fueron muy perjudicadas por los efectos que genera vivir al lado de una subestación".