Polémica y advertencias por el nuevo estatuto policial

El proyecto de reforma del estatuto policial que impulsa el gobierno de Daniel Scioli y que ya consiguió la aprobación del Senado, podría derivar en un incremento en el número de muertes de efectivos de la Bonaerense, a partir de un inciso que los habilita a portar su arma reglamentaria cuando se encuentren en franco de servicio.

La advertencia fue lanzada por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), a través de un documento que envió a la comisión de Seguridad Ciudadana y Asuntos Penitenciarios de la Cámara de Diputados, donde la norma deberá ser tratada en las próximas semanas.

El estudio denuncia que la iniciativa de Scioli va en sentido contrario a la profesionalización de la fuerza y deja a los miembros de la Bonaerense más expuestos a enfrentamientos donde pongan en riesgo su vida y la de civiles.

El centro de las críticas se basa en el inciso c del artículo 10 de la norma, que incorpora como un derecho el portar el arma reglamentaria cuando el funcionario se encuentre en franco de servicio. En la ley vigente, en cambio, esa situación está limitada a la autorización del superior en casos que lo justifiquen.

De acuerdo al informe que envió el centro a los legisladores bonaerenses, este cambio "es contrario a cualquier política que intente disminuir el número de muertes y lesiones que involucren a funcionarios policiales".

La advertencia cobró esta semana una repercusión particular, en el marco del agitado clima que se vive en la Policía provincial ante el homicidio del subteniente Miguel Angel Martínez, ocurrido en la madrugada del miércoles pasado en las afueras de La Plata.

Martínez se convirtió en el cuarto oficial de la Bonaerense asesinado mientras prestaba servicio en el último mes, en el marco de una tendencia que amenaza con superar los índices de 2008, cuando durante todo el año se registraron ocho muertes de policías en tiroteos con delincuentes.

"NO VAMOS A ESTAR MAS SEGUROS"

"Esta ley vuelve a la idea de que es un derecho usar el arma de fuego cuando los efectivos se encuentren fuera de servicio. No es que nosotros creamos que hay que prohibirlo. Pero entendemos que el arma es un instrumento de trabajo, no un derecho de la policía. Y esta iniciativa le quita profesionalidad a la fuerza".

Gustavo Palmieri, director del programa de Seguridad Ciudadana del CELS, y autor del informe, es la voz de denuncia contra la iniciativa de Scioli. Según cree, la posibilidad de que los policías tengan como derecho incorporado el uso de armas en franco de servicio "no va a generar más seguridad, sino probablemente más víctimas en la fuerza y civiles".

En el trabajo, Palmieri plantea que la falta de control sobre el uso de la fuerza "solo contribuirá a agravar la situación" de víctimas policiales.

Según las estadísticas que manejan en el centro, solo entre 2006 y 2007 se registraron al menos 30 víctimas civiles muertas en hechos de violencia con la participación de funcionarios de la Bonaerense estando en franco de servicio.