Solá dijo que el Gobierno "es una facción que sólo se defiende"

El diputado nacional electo por Unión PRO Felipe Solá afirmó que el Gobierno "es una facción que sólo se defiende" aunque aseguró que "el 10 de diciembre es cuando se producirá el cambio".

El ex gobernador bonaerense afirmó que las relaciones con sus socios políticos del frente opositor "volvieron a la normalidad tras el último acto", y destacó el gesto de su par Francisco de Narváez al señalar que "no ocultó a nadie hacia dónde quiere ir".

En una entrevista publicada por un matutino porteño, Solá dijo que "el Gobierno marca la agenda porque no hay cambio en la composición del Congreso hasta el 10 de diciembre", y acusó a la Casa Rosada de no haber procesado "en serio la derrota de su figura más importante (Néstor Kirchner) y del gobernador de la provincia (Daniel Scioli)".

"Estamos contentos y orgullosos de haber ganado, pero debemos ser realistas: las elecciones dejan claros perdedores, y lo demás es confuso. Ganamos la provincia, pero los intendentes del conurbano también ganaron sus concejos deliberantes en su mayoría; el cobismo hizo una buena performance global", destacó.

Afirmó que realizaron "aportes concretos en el diálogo bonaerense" y señaló que "hay una agenda de la oposición que el Gobierno no a va cumplir", aunque destacó que "el 10 de diciembre es cuando se producirá el cambio".

"Nadie puede alimentar una exigencia que no puede ser concretada. Está muy claro lo que pensamos y está claro que este gobierno piensa en resistir. Para entenderlo no hay que pensarlo como un gobierno que nos conduce a todos, sino como una facción que se defiende", enfatizó.

En tanto, dijo que las relaciones con De Narváez y el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, "volvieron a la normalidad tras el último acto donde se vio que ésta es y ha sido una sociedad de tres, donde De Narváez no ocultó a nadie hacia dónde quiere ir".

"Macri y yo estamos en situaciones parecidas, con un futuro abierto", destacó Solá, quien agregó que el frente Unión PRO tuvo en la última elección "un voto importante del peronismo y quedó claro que nuestra militancia es básicamente peronista".

"Tiene que pasar mucha agua bajo el puente todavía. Macri tiene que gobernar Buenos Aires dos años más y después se verá", respondió ante la pregunta del objetivo presidencial que mantiene él y el líder del PRO.