Vecino de Tolosa se defendió a los tiros: murió un ladrón

"Dame la computadora porque te mato", le habría dicho uno de los delincuentes, anoche, a la esposa de un docente jubilado al que un instante antes habían obligado a entrar junto a ellos a su casa de Tolosa. En un descuido y cuando los asaltantes no se conformaban con nada, el dueño de casa tomó un arma y efectuó entre tres y cuatro disparos: uno de los ladrones murió a pocos metros de la vivienda y el cómplice está internado en grave estado.

Eran las ocho de la noche cuando un jubilado regresaba de dejar la basura en el cesto ubicado a metros de la entrada de su casa de Tolosa, en 12 entre 521 y 522.

Pero Augusto Zanetta, de 72 años -que por el momento quedó sólo identificado en la causa-, no alcanzó a entrar solo. Dos delincuentes que habían pasaban por allí apuraron el paso, lo amenazaron y lo obligaron a ingresar, indicaron los voceros.

En el interior del inmueble la esposa de Zanetta pasaba el tiempo frente a la computadora. Pero los ladrones no dieron tiempo a nada. Se pusieron violentos casi de inmediato y más cuando la mujer les pidió que no se llevaran la notebook. "Es lo único que tengo", les habría dicho.

MOMENTOS DE TENSION

Los ladrones no escucharon a la mujer, que se habría apoyado en la computadora para evitar que se la sacaran. Eso los puso más violentos y comenzaron a forcejear para llevársela. Inclusive uno de ellos la tomó del cuello para reducirla, según las primeras informaciones que trascendieron del hecho.

La escena, relataron las fuentes, ocurrió en un hall que la casa de las víctimas tiene en la entrada. Un lugar pequeño.

Sin embargo, el hombre logró tomar una magnum que tenía en la mesa donde se apoya la computadora y disparó.

Las fuentes consultadas dijeron que tras los disparos los delincuentes dejaron la casa de las víctimas a la carrera. Uno de ellos, con un tiro a la altura del riñón, cayó en la puerta de la casa asaltada. Su cómplice, con un impacto en el abdomen, caminó unos metros, llegó a 12 y 522 y dobló hacia la izquierda, en dirección a 11, pero ensangrentado se derrumbó y murió.

Las últimas palabras del delincuente fueron a Mario Gallina, ex director del Coprosede, que vive a la vuelta de la casa de Zanetta, a metros de donde cayó el ladrón y se acercó a él sin saber lo que había ocurrido en lo de su vecino: "Me pegaron un tiro", contó a EL DIA el ex funcionario que le dijo.

El ladrón muerto fue identificado como Diego Herrera (30), mientras que su cómplice, Eric Ferrudo (18), al cierre de esta edición estaba siendo intervenido en el hospital San Roque de Gonnet. De la casa se habían llevado algo de plata, un cuchillo y unas llaves. Pegado al cuerpo del ladrón muerto los peritos secuestraron un arma de las denominadas "tumberas", aunque hasta no ser periciada no se podrá determinar si era apta para disparar.

SORPRESA Y PERICIAS

En pocos minutos llegaron al lugar el jefe Departamental Roberto Castronuovo, el titular de la Distrital Norte Rubén Diez, el comisario de Tolosa Sebastián Perea junto a una gran cantidad de efectivos, que trabajaron bajo las órdenes de la fiscal Ana Medina, que también se hizo presente en el lugar.

En estado de shock, contaron los voceros, Zanetta dio su versión. Mientras, su mujer era atendida por una ambulancia. Más tarde el hombre dialogó algunos minutos con su abogado, Darío Saldaño, quien consultado sobre la magnum explicó que "(Zanetta) mostró todas las credenciales que se necesitan y el arma está autorizada por el Renar".

Una joven, a metros del cuerpo del atacante, le dijo a este diario que en los últimos meses sobre la 522 hubo varios hechos delictivos. Y recordó a la altura de 10 un robo un kiosco, en 11 un ataque en una casa de familia y en 5 un almacén. A lo que habría que sumarle varios arrebatos. Pero jamás había visto algo como lo de anoche.

Los vecinos le contaron a este diario que conocen a Zanetta porque "vivió toda la vida en el barrio y hasta hace poco daba clases de hojalatería en la E.N.E.T Nº 8 de Tolosa".