Futbol

No pasó naranja

Cambaceres no tuvo ideas y apenas consiguió empatar ante Berazategui que hizo un negocio redondo

Hubo despliegue, sacrificio y mucha actitud en cada pelota dividida, pero no consiguió lo que se había propuesto de entrada. Cambaceres no pudo repetir su actuación del debut, y ayer, en su estadio, debió conformarse al menos con un empate a cero ante un Berazategui ordenado y de oficio, que a pesar de haber terminado con nueve jugadores (por las expulsiones de Macarié e Islas, uno en cada tiempo), jamás se metió atrás, y siempre se mostró peligroso en cada contraataque.
El partido, en realidad, fue aburrido y sin emociones, jugado prácticamente lejos de los arcos. Pero mucho tuvieron que ver con el pobre desarrollo de las acciones, el pésimo estado del campo de juego, producto de la lluvia caída en las últimas horas, y el fuerte viento. Estos dos factores hicieron que los dos conjuntos abusaran de los pelotazos, tratando de encontrar el error ajeno para sacar provecho, y se cometieran innumerables errores, fundamentalmente en las entregas.
A Cambaceres le costó acomodarse en el terreno de juego durante los minutos iniciales, pero de poco, y con el despliegue permanente de los volantes (buen trabajo de Damián Soria), fue emparejando el trámite. Adrián Jones fue importante en la recuperación del balón, al igual que Damián Manes, el capitán, que por su andarivel (el derecho) se las ingenió para inquietar, por momentos, a una defensa que comenzó con altibajos, pero que terminó redondeando una tarea sólida.
Todo el juego se desarrolló prácticamente en la mitad de la cancha. Pero a ninguno de los dos equipos se les cayó una idea como para romper la monotonía; mientras Martín Zurlo y César González (los hinchas de Camba lo ignoraron por completo) fueron simples espectadores.

MEJORO, PERO...

En la parte complementaria, Cambaceres salió con otra actitud y decidido a quedarse con la victoria. Si bien mantuvo el orden del medio hacia atrás, en ofensiva, le faltó sorpresa y explosión como para inquietar a César González.
Intentó con Yaniz, y también con Diego Jaime, pero sus aportes no fueron suficientes. En tanto Berazategui, que antes de los 15 minutos se quedaba con nueve jugadores por la expulsión de Islas, tuvo que rearmarse tácticamente sobre la marcha. Y lo hizo con inteligencia. Reforzó el fondo y dejó un sólo punta (primero Allesandrini y luego Pastor). Así y todo, aguantó bien y sin sobresaltos, pues Cambaceres no atacó ni tampoco tuvo ideas como para hacer prevalecer el hombre de más.
En líneas generales, el empate a cero fue el mejor resultado para un partido aburrido, que quedará rápidamente en el olvido.