Crimen en El Dique: vecinos denuncian a peligrosa banda

"Pericles era un chico excelente, que vino hace algo más de un año a estudiar geografía a La Plata, trabajaba para costearse su carrera y tenía para su vida algunos proyectos. Por eso, lo que le hicieron nos golpeó mucho. No se merecía morir así", coincidieron en señalar ayer a este diario vecinos y amigas de Pericles Melgarejo Castillo (24), el joven peruano brutalmente ultimado de un balazo en el cuello durante la madrugada del pasado jueves en calle 38 entre 123 y 124, a tres cuadras de la pensión que habitaba junto a un grupo de amigos en su mayoría de la misma nacionalidad.

Tal como lo reflejó este diario ayer, el crimen ocurrió a las 3.30, cuando la víctima regresaba a su domicilio de calle 38 entre 126 y 127 después de haber finalizado su jornada laboral en la parrilla "Los Discos", de 48 entre 3 y 4. Según lo informado hasta el momento por fuentes judiciales y policiales, mientras caminaba rumbo a la pensión fue sorprendido por sus homicidas, quienes, en circunstancias que aún son materia de investigación, le descerrajaron el balazo mortal.

EL CARIÑO DEL BARRIO

Testimonios recogidos ayer por EL DIA en el barrio de la víctima de este caso, permitieron conocer que se trataba de alguien muy querido por sus amistades, vecinos y compañeros de trabajo.

"Era muy sano en su forma de ser, de costumbres sencillas y que tenía muy buen corazón, porque se brindaba sin pedir nada a cambio", fue el perfil que se trazó sobre el estudiante y empleado peruano asesinado.

HIPOTESIS

Si bien los pesquisas se manejan hasta ahora con hermetismo acerca de cuál fue la razón que impulsó a quienes mataron a Melgarejo Castillo, durante el diálogo que mantuvo este diario con Carina Ibarra (36), Mónica Meniz (52), Nancy Meniz (43) y Sabrina Herrera (20), entre otros vecinos y amigos de Pericles, se deslizó una hipótesis del desenlace que tuvo quien vino a nuestra ciudad para comenzar a forjarse un venturoso porvenir e, inesperadamente, halló el fin de sus días.

"Sabemos que Pericles dos días antes de su muerte había sido interceptado por estos menores de edad que deambulan por el barrio y le habían puesto un arma de fuego en el pecho para robarle. Creemos que él en ese momento tendría muy poco o nada de dinero encima y que quizá les haya dicho el día que cobraba el sueldo en su trabajo. De acuerdo a lo que había contado, la noche en que lo mataron tendría que haber vuelto a la pensión con el sueldo, pero resulta que al final no lo cobró. Pero es posible que, con el dato de que regresaba con la plata, lo hayan estado esperando y que al no encontrarle nada hayan resuelto asesinarlo", conjeturaron.

Luego aportaron algunos datos que hasta el momento no habían salido a la luz. En tal sentido, hicieron saber que "Pericles no sólo recibió un balazo en el cuello, sino que además su cuerpo apareció con varios puntazos y al parecer también los criminales le habrían golpeado la cabeza contra la pared, porque ahí se halló manchas de sangre a la altura de lo que llegaría su cabeza estando de pie. Y también nos llamó la atención que alrededor del cadáver había un montón de piedras".

Finalmente, aludieron los "caprichos" del destino porque "Pericles nos había dicho que la noche que lo mataron iba a venir del trabajo cerca de la una de la mañana, para estar en el cumpleaños de una chica del barrio, pero al final volvió a la hora de siempre. Además, soñaba con recibirse y viajar después a España para ejercer su profesión".