"Soy un agradecido por poder hacer lo que hago"

"De la nueva imaginación de los 60, a la pictocosmosgnosis de los 2000". Así se llama la muestra retrospectiva de Lido Iacopetti que hoy, a las 19, tendrá su inauguración oficial en la Sala Emilio Pettoruti del Teatro Argentino, 51 entre 9 y 10. Al artista, no le gusta la palabra homenaje. No se siente cómodo con las veneraciones. Para él es otra cosa; quizás, una apertura. "En esta muestra -explicó- he puesto todo lo que busco a través del arte: llegar a lo más profundo del ser humano".

Por ser fiel a su humilde visión de la vida, Lido no se dejó seducir por el circuito comercial. Para él, el arte no se negocia. Siempre le interesó despertar sentimientos en la gente, decisión que le trajo más de una crítica y más de una desilusión. Sin embargo, refugiado en el taller de su casa, hizo -y hace- lo que sabe: manifestar con formas y colores mundos imaginarios que guarda en su interior, los cuales necesita compartir. "Mi actitud se sostuvo así, siempre clara y definida, dado que asumí la actividad artística como medio de transformación y de liberación, y no como una forma de egolatría o de especulación individual, trabajando constantemente por y para un mundo más pleno. Porque el arte es para mí, el medio más efectivo para embellecerlo y humanizarlo".

UN VIAJE PERSONAL

Esta muestra, que reúne más de 60 obras, sintetiza el "viaje personal" que el artista ha realizado desde sus primeras experiencias plásticas hasta la actualidad. Hay huellas de aquella etapa inaugural, la que él mismo llamó "postcubista", de lo que posteriormente denominó "Nueva Imaginación", de la "Primera Presencia Imaginativa Pura", de los "múltiples", los "agujeros" y las "imigrafías", hasta llegar a su más reciente "pictocosmognosis" (ver aparte), es decir, "el conocimiento místico del cosmos".

El artista, destacado profesor jubilado de Historia del Arte de nuestra ciudad, asegura que siempre consideró que "la expresión artística que no tiene una propuesta, no puede tener perspectiva alguna". Y consultado sobre la suya, contestó: "Mi propuesta busca lograr la creación de proyecciones sobre los demás. Conseguir una apertura a dimensiones cósmicas imaginarias".

Hasta el 13 de diciembre, de martes a domingos de 10 a 20 y con entrada libre y gratuita, el público podrá visitar esta retrospectiva de Iacopetti que, tal como señalan sus curadores, Daniel Sánchez y Claudio Martín, "nos ayuda a construir el sentido de la producción pictórica de un artista moderno, que ha utilizado esta disciplina como una herramienta de interpretación y generación de mundos y, por ende, de autoconocimiento como individuo y como parte de una comunidad".

En esta muestra, el artista abre su mundo interior e invita a formar parte de él. "Soy un agradecido por poder hacer lo que hago -concluye-; es una gracia pero no un regalo. Tiene su precio y he pegado el mío, pero lo importante para mí es haber podido, más allá de toda circunstancia y de todo sistema".

La Pictocosmosgnosis

Lido pinta para vincular mundos. En este sentido, es entendido este concepto, para muchos desconocido, que se aleja de cualquier corriente filosófica-religiosa. "Gnosis es para Lido -aseguran los curadores- el convencimiento de que sus signos pictóricos son como emisiones del cosmos que plasma disciplinadamente en la tela. No son afirmaciones científicas, sino a nivel intuitivo, místico, espiritual. Utiliza la estética para mostrar algo de manera bella y sin dañar el espíritu, tratando de hallar la virtud de modo ontológico".