Acusado de balear a Carolina sufrió quemaduras en la cara

Carlos Emanuel Burgos, el joven de 18 años detenido como presunto autor del disparo que hirió a la embarazada Carolina Piparo en una salidera bancaria en nuestra ciudad y, provocó la muerte de su bebé, sufrió quemaduras en su rostro en la unidad penitenciaria donde se halla detenido, informaron ayer fuentes judiciales.

El hecho se produjo en momentos en que la Justicia local dispuso realizar un estudio a la víctima para establecer si está en condiciones psicofísicas de realizar una rueda de reconocimiento de los sindicados autores del ataque.

Una fuente judicial confirmó que Burgos, alojado en la Unidad 9, "sufrió un accidente en la cara".

"Según relató el detenido, el 28 de septiembre último, al mediodía, quiso pasar agua caliente que tenía en una jarra a un termo y se tropezó", detalló el vocero.

Burgos, según se le comunicó al fiscal de la causa, Marcelo Romero, dijo que tropezó y "le saltó agua caliente al rostro, sufriendo quemaduras que obligaron a su atención en la unidad sanitaria del penal, donde los médicos le ordenaron siete días de cura".

OTRA VERSION

Sin embargo, su abogado, Rubén Carrazone, aseguró que el incidente fue con una frazada que se prendió fuego, al tomar contacto con un cigarrillo, y que de ningún modo se hizo intencionalmente para complicar futuras diligencias en la causa (ver aparte).

El accidente sufrido por el detenido se conoció ayer, a pocas horas de que el fiscal Romero ordenara un reconocimiento médico a Carolina Piparo, con el fin de establecer si está en condiciones de reconocer en rueda a quienes la atacaron.

"El objetivo de este reconocimiento es establecer si está en condiciones de participar en una rueda de reconocimiento con los dos detenidos que se presume iban en la moto que interceptó a la mujer, uno de ellos el presunto autor material, Carlos Burgos", destacó el informante.

DUDAS

"Se ignora si el accidente sufrido por Burgos puede dejar secuelas que alteren la fisonomía del detenido, aunque de igual manera hay fotos suyas agregadas a la causa", añadió el vocero.

Carolina Piparo estaba embarazada de 9 meses cuando fue baleada el 29 de julio último tras retirar dinero de una sucursal del banco Santander Río de las calles 7 y 42.

Tras el ataque fue trasladada al hospital San Roque, de Gonnet, donde se le practicó una cesárea de urgencia para salvar a su hijo Isidro, que sobrevivió apenas una semana.

La mujer fue dada de alta tras 43 días de internación y, permanece junto a su familia en un lugar desconocido, presumiblemente en un country de las afueras de la Ciudad.