Intendentes presionan para cambiar la ley de internas

Intendentes oficialistas del Conurbano están impulsando un cambio en la ley de internas abiertas bonaerense que apunta a evitar que se les erosione su poder territorial. Concretamente, vienen empujando la modificación de un artículo de la norma para que quienes los desafíen en la interna peronista, tengan que obtener un alto número de votos para obtener representación en las listas que luego competirán en la elección general.

La ley de internas sancionada por la Legislatura establece que para el reparto de cargos se utilice el sistema D`Hont con un piso del 10% de los votos. Es decir, llegando a ese porcentaje, cualquier lista empieza a colocar representantes en la nómina que será consagrada para competir en la elección general. Pero además, ese plexo legal obliga a todos los partidos a adecuarse a esa forma de reparto.

Pero los barones del Conurbano resisten esa exigencia que consideran "muy baja" y, en cambio, proponen que cada partido distribuya los cargos de acuerdo a lo que establece su carta orgánica. Y como en el peronismo obliga a las listas a obtener un mínimo del 25% de los votos para llegar a la minoría, se subiría la exigencia para quienes desafían a los oficialismos en cada distrito.

Por esa causa, varios intendentes están reclamando la modificación del artículo 14 de la ley de internas bonaerense para que cada partido, fuerza o alianza, se rija para el reparto de cargos de acuerdo a lo que establezca sus propias cartas orgánicas.

"La eliminación del artículo significaría poner en línea la ley provincial con la nacional", dicen quienes defienden la iniciativa de los jefes comunales, que desde hace algunos días están empujando la reforma tanto en el Ejecutivo como en la Legislatura.

CONTACTOS Y RECHAZO

La jugada tiene relación en parte con la polémica iniciativa de la Casa Rosada de habilitar colectoras en la Provincia. Los intendentes resisten ese mecanismo porque permitiría a sectores no peronistas pero afines al kirchnerismo -como el caso de Martín Sabbatella-, acceder a bancas con los concejos deliberantes.

Con esta reforma, los alcaldes evitarían una situación similar desde la propia interna: bloqueando a sus opositores peronistas que los quieran desafiar o, al menos, dificultándoles que lleguen a obtener representación en las listas.

Según trascendió en diversas fuentes consultadas por este diario, el proyecto ya fue redactado y por estas horas el oficialismo busca consenso para llevarlo al recinto en la Cámara de Diputados. Incluso, sectores del PJ afirman que tendría el aval del gobernador Daniel Scioli.

"Nos podrán meter las colectoras, pero no vamos a permitir que nos roben concejales también las minorías", dicen que confesó uno de los alcaldes del Conurbano que monitorea la negociación.

El tema amenaza con generar una fuerte polémica con sectores de la oposición. El radicalismo, por caso, fue el que fogoneó ese artículo que ahora se pretende derogar y sectores de ese partido anticiparon que no van a apoyar la reforma. En el Senado, el FpV cuenta con mayoría como para votar la reforma, pero en Diputados, el oficialismo deberá trabajar duro para encontrar aliados que lo acompañen en la movida.