EEUU: reprimen a indignados

La policía lanzó gases lacrimógenos anoche para dispersar a cientos de manifestantes anti-Wall Street en la localidad de Oakland, cerca de San Francisco, en el estado de California.

Columnas de humo blanco cubrieron las calles y el ruido de las granadas de gas hizo eco en los edificios de la zona mientras los manifestantes se diseminaban ante la presencia de la policía antimotines, que había arrestado a decenas y les había advertido que se dispersaran.

Al menos uno de los manifestantes cayó al suelo, con la cabeza sangrando e inconsciente, tras ser golpeado por un cartucho de gas lacrimógeno. Luego fue sacado del lugar por sus compañeros de protesta.

Los manifestantes luego se reagruparon y comenzaron a lanzar huevos a la policía antimotines, que respondió disparando balas de pintura.

Una portavoz de la policía confirmó más temprano el arresto de unas 85 personas en la mañana durante un primer operativo para dispersar a los manifestantes de su campamento en una plaza en Oakland.

Las calles del centro de la ciudad fueron cerradas temporalmente cuando la policía antimotines desalojó a los manifestantes de la plaza Frank Ogawa, reportó el diario San Francisco Chronicle.

Pero los manifestantes intentaron luego regresar al campamento que habían ocupado durante dos semanas como parte de las crecientes protestas contra lo que consideran la codicia corporativa y la ineficacia del gobierno