Se apuran los alquileres del verano por temor al impacto del cepo cambiario

Los últimos fines de semana en Pinamar se parecieron poco a los típicos del mes de setiembre de años anteriores: se podía ver a turistas consultando por alojamiento para el verano e, incluso, concretando operaciones. Situaciones, todas, que normalmente no se observan antes del final de octubre. “Muchas de las propiedades más importantes ya se alquilaron y todo se está adelantando”, dicen desde la dirección de Turismo del Pinar. El mismo panorama se vive en toda la Costa, donde esperan un verano con mayor afluencia de turistas que los anteriores. Y donde, con el verano todavía lejos, abundan las consultas.

Desde las diferentes localidades balnearias no dudan: el adelantamiento del interés de los turistas se relaciona con el temor a quedarse sin lugar o la intención de asegurarse un mejor precio alquilando antes. Esto sucede frente a la perspectiva de un verano en el que muchos de los argentinos que en los últimos años veranearon en el exterior vuelvan a hacerlo fronteras adentro a partir de las restricciones cambiarias dispuestas por el gobierno nacional. La preocupación que acompaña a esta tendencia es que los precios en las playas bonaerenses aumenten por encima de lo esperado.

En Pinamar, por caso, se espera recibir a buena parte de los turistas que en los últimos años veranearon en Uruguay y Brasil.

Como en toda la Costa, allí la expectativa es que los aumentos se ubiquen entre el 20 y el 28%. Pero no se descarta que esos porcentajes puedan subir más en el umbral de la temporada alta.

“La gente se está adelantando para asegurarse el alojamiento, porque toda la Costa se está preparando para una temporada especial, ya que estas medidas van a beneficiar al turismo interno y traer muchos más turistas. Por lo demás, aunque hay una intención de mantener los precios dentro de los márgenes de aumento previstos, se sabe que eso es muy difícil a medida que la temporada alta se acerca. La Argentina, en ese sentido, se ha caracterizado por ser muy imprevisible”, dice Juan Carlos Bucheli, director de turismo de Pinamar.

En la misma sintonía, el presidente del colegio de Martilleros de Mar del Plata, Miguel Angel Donsini, indicó que “los aumentos previstos están calculados en función de los incrementos salariales de este año, por lo que se ubicarán entre el 18 y el 28%”. Con todo no descartó aumentos por encima de esos índices más cerca de enero y consideró “conveniente” para los turistas alquilar cuanto antes.

Mientras tanto, a la ansiedad de los visitantes que se adelantan más de un mes para hacer sus consultas y concretar operaciones se opone la actitud de muchos propietarios, que optan por la cautela y prefieren esperar ante el temor a cerrar acuerdos a esta altura del año y terminar perdiendo dinero.

En el marco de esta inquietud por los precios, el secretario de Turismo de la Provincia, Ignacio Crotto indicó que “como todos los años, nos reuniremos con los sectores privados, buscando que los precios sean lo más accesibles posibles”.

PRECIOS

Mientras las cámaras empresarias se disponen a dar a conocer por adelantado los cuadros tarifarios estimativos para cada año (por caso, este martes se espera que el colegio de Martilleros de Mar del Plata difunda los suyos) ayer la subsecretaria de promoción Turística del Ministerio de Turismo, Patricia Vismara, dio a conocer algunos precios promedio estimativos para el verano en la Costa en el marco de una comparación con balnearios de países vecinos, tales como Florianópolis, Punta del Este o Río de Janeiro (ver gráfico).

Entre esos precios aparecen el del alquiler de un departamento de 2 ambientes por semana en la Costa Atlántica a 3.397 pesos en promedio (alrededor de 3.000 en Mar del Plata, alrededor de 3.240 en Gessell); la habitación doble en un hotel 3 estrellas por noche a 517 pesos; un menú completo a 50 pesos y un viaje de 20 cuadras en taxi a 16,80 pesos. Todos estos valores son superados por los vigentes en playas de los países vecinos, según el informe, que fue elaborado por el Ente Municipal de Turismo de Mar del Plata EMTUR.

ALQUILERES

En tanto, algunos de los valores que se manejan en Pinamar, donde esperan que se concentre la mayor afluencia de veraneantes que hasta el año pasado viajaron al exterior, muestran aumentos que promedian el 20% con relación al año pasado.

Por ejemplo, por el alquiler de un departamento de 60 metros cuadrados cercano a la playa para la segunda quincena de enero se está pagando alrededor de 7.000. Si se trata de un chalé de 150 metros cubiertos se habla de 19.000 pesos por el mismo período y 50.000 pesos por un lujoso chalet de dos dormitorios.

En tanto, las estimaciones de los propietarios de balnearios de Mar del Plata hablan de un incremento de entre el 17 y el 22% en el costo de la sombra para este verano: se podrán conseguir carpas por entre 6.800 y 12.500 pesos por toda la temporada. Si se trata de enero, los precios de algunos balnearios ascenderán al orden de los 3.000 pesos por quincena.