Se convalida una mayor devaluación

El Banco Central, es quien regula el precio del dólar oficial, mediante sus intervenciones en el segmento mayorista y utiliza su cotización como un dique antiinflacionario. Sin embargo en los últimos meses permitió una mayor libertad en las cotizaciones, lo que hizo trepar fuertemente el ritmo devaluatorio que pasó del 4,5% en 2010 a 8,3% en 2011 y a 13,7% en el estimado de este año,

El ritmo de devaluación del dólar en el segmento oficial, donde se establecieron los controles del Banco Central y la Afip para las transacciones de moneda extranjera, ascendió a 13,7% este año (desde $4,30 en enero), un ritmo que duplicó el de los dos años anteriores, pero que no alcanzó a la inflación real, que se sitúa en torno al 25% anual.

Los especialistas señalaron que ante la aceleración de la fuga de capitales de 2011 se veía venir un cepo cambiario. Y el cepo fue virtualmente la única herramienta elaborada por el Gobierno en el último año

Según estos expertos, se viene un 2013 con una fuerte salida del dólar frente a otras mondas.

Estos expertos también señalan que pese al malestar que provocó en amplios sectores de la población, el cepo fue una de las pocas respuestas a manos del Gobierno para evitar una nueva corrida“

Con sus constantes intervenciones, la autoridad monetaria respaldó la ligera baja del dólar mayorista, Así, la devaluación del peso en el segmento interbancario acumuló 1,6% en diciembre y 13,7% en el año.

“Un ligero avance experimentó el dólar mayorista, tras haberse ya alcanzado el ritmo de deslizamiento del 1,5% que anticipaban los operadores también para diciembre.

INFLACION

El efecto que produce la elevada inflación argentina se puede advertir por su comparación con otras divisas de la región, que, en sentido inverso al peso argentino, se apreciaron sensiblemente respecto del dólar, en un contexto de estabilidad de precios. El sol peruano subió un 5,38% en 2012, el peso colombiano acumuló un alza de 9% y el peso chileno se apreció el 7,79% respecto de la divisa estadounidense.

El peso uruguayo sumó un alza más modesta, de 2,57% en el año, mientras que el real brasileño, al igual que el peso argentino, culminó 2012 con una devaluación del 8,55% frente al dólar.