La pequeña Wendy y la Tigresa del Oriente, en la Ciudad

Convertidas en íconos de un fenómeno musical que navega entre lo folclórico y lo bizarro, y protagonistas de algunos de los videoclips más reproducidos en la historia de YouTube, las cantantes peruanas Wendy Sulca y “La Tigresa del Oriente” desembarcan en La Plata en el marco de una anunciada gira nacional que, la semana pasada, tuvo a una de las dos posando para las cámaras en la mismísima Casa Rosada, un episodio que revolucionó las redes sociales.

Con tantos admiradores como detractores en todas partes del mundo, las estrellas peruanas son parte de un fenómeno virtual que, según especialistas, va más allá de la música. “Reflejan una sociedad marginal que la gente no hubiera conocido de otra forma. Gracias a la red han podido hacer ver al mundo que ellos existen y hay que respetarlos”, aseguró Cristian Espinosa, especialista en nuevos medios.

En este sentido, el ecuatoriano Delfín Quispe fue pionero ya que su video “Torres Gemelas” en 2006 fue el primero en Latinoamérica en alcanzar los dos millones de reproducciones en YouTube. En dicha canción, el cantante llora desconsolado la muerte de su amada en el atentados del 11-S.

Con una estética cerca a lo kitsch, las letras de estas cantantes bucean entre la tolerancia y la aceptación y en más de una ocasión han provocado polémicas por meterse con temas controvertidos.

Wendy Sulca, quien saltó al estrellato con su nana a la lactancia en “La Tetita”, también protagonizó otros hits como “Cerveza, Cerveza”, en donde la por entonces niña se ponía en la piel de un aficionado a dicha bebida para destacar los peligros del alcoholismo.

Más llamativa es “La Tigresa de Oriente”, una ex peluquera de sesenta y tantos años, que interpreta “Adolescente”, una de sus últimas producciones audiovisuales con una corta minifalda y un atrevido escote con estampado atigrado y el pelo muy cardado, todo muy felino