Acompañar, orientar, dialogar

ROXANA MORDUCHOWICZ AUTORA DEL LIBRO LOS CHICOS Y LAS PANTALLAS

Los chicos viven entre tres pantallas: la televisión, el celular y la computadora. Viven en un mundo visual. Las casas argentinas tienen más pantallas que libros, diarios y revistas. Los chicos utilizan las pantallas para todo: comunicarse con amigos, buscar información, escuchar música, ver películas, mirar televisión, hacer la tarea y jugar.

Aun cuando los más jóvenes se sientan “expertos” y afirmen que son los que “más saben” de tecnología en la casa, es cierto también que este saber es instrumental. Los chicos pueden saber cómo resolver problemas tecnológicos y cómo manejar las herramientas mejor que sus padres. Sin embargo, la experiencia de vida y la capacidad de reflexión es siempre de los adultos.

Por ello es tan importante que los padres acompañen a los chicos en el uso que hacen de las pantallas y estén al tanto de sus prácticas.

Algunas sugerencias y recomendaciones para promover un uso responsable de la tecnología son:

• Mantener las pantallas en una sala de circulación colectiva (comedor, escritorio, cocina, etc.). Cuando los chicos tienen la televisión o la computadora en su habitación, además de aumentar el tiempo de uso, lo hacen en soledad porque el cuarto suele ser un territorio propio de los chicos.

• Dialogar acerca del uso que hacen. La mejor manera de conocer qué hacen los chicos cuando utilizan las pantallas, es dialogar con ellos (aunque sea un momento al día) sobre el programa de TV que prefieren, los sitios web que eligen y las personas con las que chatean.

• Explicar que no deben dar datos personales en Internet. Explicarles que en Internet nada es 100 por ciento privado y por lo tanto es conveniente evitar publicar datos personales (nombre y apellido, edad, dirección, escuela, horarios de actividades, etc.)

• Recomendar no encontrarse con desconocidos personalmente. Es importante explicarles que no deben encontrarse con gente que han conocido a través de Internet.

Como siempre, el diálogo familiar es la mejor manera de asegurar que los chicos naveguen por la web y utilicen las pantallas con una buena brújula.