Cruces por operativo de Arba en la feria de Tigre

Una inspección realizada ayer por la Agencia de Recaudación bonaerense (Arba) a una feria que funciona en Tigre, desató un fuerte contrapunto entre funcionarios del gobierno de Daniel Scioli y dirigentes vinculados a Sergio Massa.

Todo arrancó cuando Arba detectó “irregularidades” en puestos que funcionan en el Puerto de Frutos de Tigre e intimó al municipio en su carácter de administrador, por los incumplimientos vinculados al pago del impuesto a los Ingresos Brutos.

“Los fiscalizadores intimaron a la administración del emprendimiento, que está a cargo del municipio, ya que incumplía con la obligación legal de actuar como agente de percepción de tributos del fisco provincial y, por ese motivo, omitía ingresar alrededor de 1 millón de pesos al año”, según informó la Agencia de Recaudación.

La embestida de Arba generó de inmediato reacciones políticas, ya que e operativo se produjo en Tigre, cuna del massismo. “Siempre Iván Budassi fue un tipo serio, pero la sobredosis de Fanta lo está haciendo hacer payasadas”, disparó no sin ironía el intendente de San Miguel, Joaquín de la Torre.

De la Torre disparó sobre el titular del organismo recaudador y enlazó en su crítica vía Twitter el color naranja que identifica al sciolismo con la tradicional gaseosa.

Pero Budassi no se quedó atrás. Usó la misma red social para contestarle al alcalde massista. “Estuvimos controlando ferias en Lomas de Zamora, Avellaneda, La Plata, Tandil, Vicente López y otros 16 partidos”, arrancó el funcionario. Y completó: “Eso sí, nos sorprendió que el administrador (el municipio de Tigre), no esté inscripto como lo obliga la resolución 19/13 y sus precedentes”.

Los inspectores de Arba, quienes recorrieron los puestos de la feria y los negocios de la zona comercial para controlar si estaban correctamente inscriptos como contribuyentes y si emitían factura.

Los fiscalizadores intimaron a la administración del emprendimiento, que está a cargo del Municipio, “ya que incumplía con la obligación legal de actuar como agente de percepción de tributos del fisco provincial y, por ese motivo, omitía ingresar alrededor de $1 millón al año”.