Peleaban en la calle y la siguieron en la comisaría

LA BATAHOLA OCURRIÓ A ÚLTIMA HORA DEL VIERNES. NO ESTÁ CLARO POR QUÉ SE ENFRENTARON LOS AGRESORES, QUE TERMINARON PRESOS

De los insultos a las manos, y de las trompadas a los palazos. Una pelea que empezó en la calle por motivos que nunca se aclararon continuó luego adentro de la comisaría de la Mujer, enfrente de la Estación de Trenes.

Los primeros en advertir la situación (y pedir apoyo) fueron los policías de guardia que el viernes a eso de las 23.30 estaban en la dependencia de 1 entre 42 y 43. Un hombre de 29 y otro del que no se tienen datos fueron los protagonistas de una gresca que empezó en la vereda. Por el grado de exaltación y hostilidad entre ellos y hacia los agentes, los encargados de detenerlos no pudieron averiguar cómo empezó todo.

Desde el escritorio donde se reciben denuncias, una oficial de servicio escuchó la pelea en el pasillo de entrada de la seccional. Nadie se explica para qué trasladaron la pelea hacia la comisaría.

Entrenados en esta clase de episodios, los agentes de guardia primero intentaron disuadir el conflicto. Pero los hombres no cedían y seguían trompeándose. Para peor, uno de ellos desvió la mirada y notó que en un rincón de las oficinas estaban las escobas con las que los policías barren todos los días.

Y las agarraron: cada uno de los hombres pasó de las manos a los palazos. Para tornar el cuadro aún más dramático también intentaron pegarle escobazos a las policías, se informó en un reporte oficial.

No trascendió si en el medio de la reyerta hubo vidrios o muebles que hayan quedado rotos, por la furia de los peleadores.

A los pocos minutos llegaron los agentes de apoyo, que tuvieron que reducir a los agresores y esposarlos para inmovilizarlos.

Según se informó, los policías solamente pudieron identificar a uno de los protagonistas de la pelea, mientras que el segundo se negó férreamente a dar sus datos.

Ambos quedaron imputados por los cargos de “lesiones” y “resistencia a la autoridad”. Fueron llevados a la comisaría 2ª, donde pasaron la madrugada del sábado y de donde fueron llevados a declarar.

Luego, estarían en condiciones de quedar libres, debido a que los dos delitos que les achacan son excarcelables. Con la tensión y la sorpresa que suscitó esta pelea, los oficiales a cargo de la pesquisa procuraban aclarar, al menos, por qué los dos hombres fueron a parar a una comisaría para seguir la pelea.