“El pajarito y el cabrito” de Griselda Siciliani

"Qué bien estuve, ¿te encantó? ¿Viste que metí dos cosas nuevas? El pajarito y el cabrito tomando agua con efecto. ¿Te gustó? ¿Cuál te gustó más? El cabrito estuvo re lindo", dice Griselda Siciliani luego de un encuentro fogoso con Damián De Santo.

Y agregó: "Me gusta cuando te queda como salado. ¿Sabés qué siento cuando estamos así los dos? Que somos como un alma sola. A veces me da como ganas de llorar, nos conectamos porque nos conocemos".

Si bien se sabe que va a estar poco tiempo en la tira es imposible que este personaje no empiece a hacerse entrañable en estos primeros capítulos. Ella es inimputable. Besa apasionadamente a su novio, le pasa la lengua por su cara cual perrito, baila haciendo pasos hot y su pareja la rechaza.

Tiene un tono de voz algo similar a lo que hizo en Sos mi vida, cuando se puso en el papel de Deby. Es una clásica "rubia tonta" en postura exacerbada. La risa es impostergable cuando le pone nombre a sus posturas sexuales "pajarito" y "cabrito". El toque de lo absurdo es donde Siciliani más puede experimentar y así lo hace