La lluvia no los pudo detener

La lluvia fue la principal protagonista de la previa del superclásico, pero los estoicos hinchas de River Plate soportaron el agua para poder ver a su equipo, líder e invicto, frente a Boca Juniors por la décima fecha del Campeonato de Primera División.

En un operativo que contó con dos cacheos para controlar a los simpatizantes `millonarios`, la mayor preocupación fue la intensa cortina de agua que se desató sobre el estadio Monumental.

Por esa razón, el árbitro de encuentro, Mauro Vigliano, recorrió la cancha en dos oportunidades debido a la gran cantidad de agua caída en el campo de juego durante toda la jornada dominical.

Sin embargo, la lluvia no amilanó a los hinchas locales, que coparon el estadio al máximo de su capacidad y no pararon de cantar en toda la previa.

Tampoco ahorraron silbidos cuando ingresó el arquero de Boca Agustín Orión a reconocer el campo de juego para ser peloteado por los ayudantes del cuerpo técnico `xenieze`.

Los cantos estuvieron focalizados en el clásico rival y el pedido para que el equipo logre una victoria, que no se da en este estadio desde 2010, con recordado cabezazo de Jonathan Maidana.

BANDERAZO XENEIZE

Mojados hasta los huesos por la lluvia, por momento torrencial, casi dos mil hinchas de Boca Juniors hicieron un banderazo de apoyo al plantel xeneize frente al hotel donde esperó la llegada del superclásico. Sin incidentes y con fuerte custodia de la Prefectura Naval, durante más de dos horas simpatizantes boquenses cantaron y movieron sus banderas para darle fuerzas al plantel. Tras más de una hora de “dale Bo...” y petardos que sonaban bien fuerte en las alturas del tercer piso, desde sus balcones salieron los futbolistas para agradecer el gesto, como ocurrió en octubre del año pasado cuando tras el banderazo Emmanuel Gigliotti marcó el gol de la victoria en el Monumental. Es que allí no habrá hinchas de Boca y por ello volvieron a decir presente frente al Madero Hotel, en Rosario Vera Peñaloza y Juana Manso. Además de banderas, hubo un colage hecho con cartón de la forma de un ataúd con los colores de River y la letra B, por el descenso del millonario en junio de 2011. Pero también hubo otra enorme pancarta de La 12, la barra brava de Boca, que reclamaba “que vuelvan los visitantes” y que en letras más grandes señalaba “La única hinchada que es local siempre”. La cita fue para las 13 pero más de una hora antes ya había cientos de hinchas muchos padres con chicos que optaron por irse cuando arreció la lluvia, aunque la mayoría siguieron hasta después que partió el micro de la empresa FlechaBus a las 15.