En Uruguay, a la caza de insatisfechos e indecisos

Por JORGE FIGUEROA (*)

Los insatisfechos y los indecisos definirán a último momento la posibilidad de que la coalición de izquierda Frente Amplio (FA) gane por tercera vez consecutiva el Gobierno uruguayo o pierda la mayoría parlamentaria en las elecciones del próximo domingo 26 de octubre.

“No hay duda” de que FA será el partido más votado el próximo domingo pero resulta “muy difícil” que logre retener la mayoría en el Parlamento, dijo a Efe Mariana Pomies, directora de la consultora Cifra.

De acuerdo a la penúltima encuesta realizada por la empresa, que está a punto de difundir la última antes de las elecciones, el candidato presidencial de la coalición de izquierda, el expresidente Tabaré Vázquez (2005-2010) recibe el apoyo del 43% de los habilitados para votar.

El candidato del Partido Nacional o “Blanco” Luis Alberto Lacalle Pou tiene el 33% de apoyo y el aspirante a la presidencia del Partido Colorado, Pedro Bordaberry, el 15%. Más atrás queda el candidato del Partido Independiente, el cuarto con representación parlamentaria, Pablo Mieres, con el 3%.

De acuerdo a todas las encuestas, Vázquez no logrará la mayoría en la primera vuelta y será necesaria una segunda instancia, el 30 de noviembre, para definir el presidente entre él y Lacalle Pou.

Según Cifra el 5% de los habilitados para votar está indeciso y ese porcentaje, “puede resultar clave”. Por ello los mensajes de cierre de campaña de los partidos están siendo dirigidos, en buena medida, hacia quienes no tienen decisión tomada.

Pero además, hay un número “importante” de insatisfechos, de uruguayos que “no tienen puesta la camiseta” de ningún partido pero que al final deberán elegir, dijo.

Hay un número “importante” de insatisfechos, de uruguayos que “no tienen puesta la camiseta” de ningún partido

El FA enfrenta el “desgaste natural” de diez años en el poder y, aunque en general se acepta que el país “está bien” económicamente, hay grupos que entienden que la izquierda “no logró resolver” los problemas de la seguridad y la educación, agregó. Esos grupos “no son muy grandes” pero ante la paridad “pueden definir las elecciones”, señaló la analista.

Un total de 2.620.717 uruguayos están habilitados para votar en elecciones con voto obligatorio y en las cuales deberán definir entre unas 40 listas de candidatos al Senado y más de 500 de aspirantes a la Cámara de Diputados.

Para Pomies los partidos “saben” que la definición de la mayoría parlamentaria “sin duda tendrá incidencia” en la segunda vuelta electoral.

Si el FA logra retener la mayoría parlamentaria “es difícil” que Vázquez pierda posteriormente en la puja por la Presidencia con el aspirante del Partido Nacional.

Por el contrario, si los partidos tradicionales (Blanco y Colorado) logran que la izquierda pierda la mayoría en las cámaras de senadores y diputados las posibilidades de que Lacalle Pou llegue a la presidencia “sin duda crecen”, estimó.

Los indecisos tendrán un “papel central” en las elecciones porque la definición será “apretada” y porque su número “parece estar creciendo”, destacó el director de Opinión Pública de la empresa Equipos Mori, Ignacio Zuasnabar.

La empresa le otorga un porcentaje de apoyo a Vázquez del 40%, 28% de preferencia popular por Lacalle Pou, 11% que votará a Bordaberry y 2% a Mieres con un 15% de indecisos o que prefieren mantener su voto en reserva.

De ese 15% de indecisos, 6% duda entre todos los candidatos, 3% entre votar a blancos o colorados, 2% entre el FA y otros grupos de izquierda menores, 3% no contesta y 1% probablemente no vote, detalló el experto.

El mayor porcentaje de indefinidos son mujeres y radicadas en el interior del país.

(*) Columnista de EFE