Opinan los lectores

Adopción de bebés

María Noel Forame expone: “Luego de varias semanas juntando papeles para armar la famosa carpeta para inscribirnos en el registro de adoptantes, fuimos con mi esposo al Tribunal de Menores de 7 y 56 llenos de ilusión. Sorpresa la nuestra al recibir la noticia de que no recibían más inscripciones debido a no sé qué pedido del Juez de la Corte.

De allí nos dirigimos a otro Tribunal del mismo edificio, donde nos informaron que el que recibía las carpetas de solicitantes era otro en 7 y 524. Hacia allí fuimos. Luego de revisar todos nuestros papeles la empleada consultó a la secretaria del Juez y nos informó que ese Juzgado tampoco recibe solicitudes de adoptantes por la misma causa anterior. Y que nos llamaría cuando la Corte se expida.

Conclusión: en estos momentos donde son públicos los casos de ventas de bebés y se persiguen las bandas de tráfico de niños, y miles de niños son abandonados y los pedidos de adopción tardan años en concretarse, en La Plata una pareja ni siquiera puede inscribirse para solicitar un niño en forma legal para darle amor y un hogar

Perra con corazón humano

Micaela Vidal nos dice: “Eso fue lo que leí en títulos de un noticiero, refiriéndose a la perrita que encontró a la beba en Romero y la cobijó. La verdad, ver ese título me indignó, diría que es una perra con corazón de perra/o, pero no humano.

La mayoría de los humanos, muchos profesionales, muchos muy cultos, de familias bien constituidas, no ayudamos y hasta ignoramos completamente que hay niños en las calles pidiendo, cachorros de perros o gatos abandonados y todo sigue su curso, “es normal” ver todo esto. Los humanos abandonamos a nuestros niños, a nuestros abuelos, a nuestros enfermos, y sobre todo a nuestros animales, por las razones más insólitas: porque “se volvió demasiado agresivo” “porque ya está grandecito y me rompe todo”, “porque me mudo y no entramos”, “porque se enfermó”, “porque ya no es gracioso y dejó de ser cachorro”, porque me cansó, no aprende lo que yo humano le ordeno”.

Obviamente como soy un humano pensante, el “más racional de todos los animales” yo mando, yo ordeno, yo dirijo, yo golpeo y tengo derecho, si el animal no me hace caso”, etc.

A ver si aprendemos un poquito más de este ejemplo y somos nosotros los que demos el próximo. Hace bastante sale publicado en las últimas hojas de este diario que un hogar de perro pide alimento, ¿por qué lo tienen que publicar?. Nosotros mismos deberíamos solidarizarnos con quienes se preocupan por lo que nosotros no hacemos.

A la perita no le importó si el bebé era mujer, varón, negro, blanco, asiático, pobre, rico, etc. Hagamos lo mismo, compremos aquel perro que nos gusta pero también ayudemos a aquel que más lo necesita, al animalito que está en la calle, que no tiene nada y que carga con nuestra indiferencia. Ojalá lo que pasó nos sirva para la reflexión y aprendamos de nuestros errores.”

Picadas en el Bosque

María Laura Nieto nos dice: “Como en reiteradas oportunidades, en la madrugada del lunes 18 de agosto, día feriado, me desperté sobresaltada por el rugido infernal de los motores de autos y motos de quienes corren picadas en la zona del Bosque.

“Me resulta inexplicable que estas personas se apoderen libremente del espacio público para llevar a cabo este tipo de prácticas incivilizadas. Más allá de alterar el ansiado descanso que todos merecemos, resulta obvio afirmar el peligro que constituyen para las vidas de las personas: hay quienes en ese horario concurren o retornan de sus trabajos, muchos de ellos ciclistas.

“En mi largo desvelo, pensaba también en los animales del Zoológico, que tienen que soportar semejante tortura, estando sometidos, de por sí, al estrés del encierro.

“Tiempo atrás, nos enterábamos con satisfacción de que en un operativo policial les habían incautado los vehículos, pero a la brevedad volvieron al ruedo. Una solución práctica y definitiva sería la colocación de lomos de burro en la avenida del Bosque y así evitar que puedan correr; han transformado a las calles en una pista de automovilismo.

“Reflexionaba también acerca de las innumerables asignaturas pendientes que tienen nuestras autoridades y en la impotencia que experimentamos quienes habitamos esta ciudad, al ver cómo día a día se deteriora nuestra calidad de vida. Toda una invitación a buscar como alternativa nuevos horizontes, más calmos y más seguros”.

Reclamo de vecina de Los Hornos

Azucena E. Corbani denuncia: “Hace 10 años que vivo en 158 y 62 y durante todo ese tiempo me pasé haciendo notas de reclamos, con fotos incluidas y también me he entrevistado con distintos delegados municipales, con el fin de que den una solución a nuestro problema, que es el siguiente: por la calle 62 de 157 a 161 es zona intransitable, no se puede pasar ni cuando no llueve. Cuando caen dos gotas de agua parece una isla. La otra calle es la 158 de 66 a 60, que hasta 62 son pozos y pozos y tampoco se puede transitar, habiéndose mejorado todas las calles de alrededor, las cuales son muchas. Sólo pedimos que mejoren las mismas, porque si pedimos al asfalto es algo imposible.

Pero los impuestos los tenemos que pagar, y me están cobrando increíblemente mantenimiento de asfalto. Encima, si no pagamos nos intiman. Estoy indignada, ya que con este último delegado municipal, el Sr. Tinto, hablé personalmente y entregué la nota creo número veinte, a la que sellaron y dieron número de expediente. Y se me prometió que en una semana iban a pasar las máquinas y ya hace más de un mes que no tenemos novedades al respecto.”

Paro de docentes

Carlos Forner dice: “Quiero decirles a los ministros de Educación que soy profesor de música egresado de la UNLP, trabajo en el E.S.B. T5 de nuestra ciudad. Soy un trabajador como la mayoría de mis colegas que, por elección, abraza fuertemente esta profesión desde hace diez años y cada vez con más pasión y compromiso. Estas palabras de introducción son para aquellos funcionarios que, como el ministro Tedesco, intentan mostrarse ante los padres de nuestros alumnos como personas sensibles y comprometidas con la educación pública, que se “preocupan” y se “angustian” porque los “chicos pierden” cuando los docentes realizamos una medida de fuerza reclamando un salario básico igual a la canasta familiar y condiciones de infraestructura dignas para enseñar y aprende en las escuelas.

“Estos funcionarios de la educación pública no salen a mostrarse cuando a diario en las escuelas se suspenden las clases por la falta de accesos, micros (EPB35), calefacción (ESB 13), inundación y paredes electrificadas (Téc. 3, ESB19) y la lista sigue. Es decir no hablan cuando el Estado se ausenta incumpliendo con las obligaciones establecidas en la Constitución Nacional, la Constitución de la Pcia. de Bs. As., los Derechos del Niño, etc. ¿será que ahí los chicos no pierden?.

“La educación no es un juego y mientras los sucesivos gobiernos la sigan atacando, no sólo pierden los “chicos”, pierde el país, perdemos todos... ¿no querrán tener un país de perdedores?.

“Me olvidaba: mis hijos también pierden días de clase porque van a escuelas públicas, y el más pequeño (de 1 año) lamentablemente no pudo entrar al jardín maternal por falta de cupo, (pese a que pasé la noche en la calle para inscribirlo primero”.