Para el Gobierno "está cerrada" discusión con Macri por el Colón

El Gobierno ratificó hoy que está "cerrada" la pelea con Mauricio Macri y que no hay "marcha atrás" en la decisión de la presidenta Cristina Kirchner de faltar a la reinauguración del Teatro Colón, aunque la administración porteña dijo que esperará "hasta último minuto" la presencia de la mandataria en el acto.

"Este es un tema cerrado. No hay vuelta atrás", señaló el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, poco antes de presidir el festival militar en el Paseo del Bicentenario.

El jefe de ministros consideró que la decisión de la jefa de Estado es una "postura lógica" frente a los agravios que dijo recibir de parte de Macri por el avance en la causa por espionaje, en la que el mandatario porteño vincula al ex presidente Néstor Kirchner.

"Era una situación muy delicada. Se ponía en riesgo a la Presidenta, se la ha agraviado en los últimos días en reiteradas oportunidades", remarcó Fernández.

Por su parte, el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, confirmó que recibió una llamada telefónica de Macri para pedirle a Cristina Kirchner que cambiara de postura y asistiera al Colón, pero evitó dar detalles acerca de esa conversación.

A pesar de la negativa de la Presidenta, el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, reiteró este sábado la invitación y aseguró que "hasta último minuto" esperarán que reconsidere su rechazo.

"Invitamos a todos, a todos los ex presidentes, los ex intendentes, la oposición, Poder Judicial, diputados y senadores para que participemos juntos del festejo del Bicentenario y reapertura del Colón. Más abierto y plural no pudo haber sido nuestro planteo", evaluó.

Pidió, además, aprovechar el aniversario de la Patria para "dar una imagen diferente de la política" y "festejarlo todos juntos, dejando las diferencias de lado por unos días".

"Esperamos hasta último minuto a ver si la presidenta reconsidera y viene a participar del festejo del Bicentenario", agregó en declaraciones radiales.

Mientras tanto, dirigentes de la oposición salieron este sábado a cuestionar la falta de acuerdo entre Nación y Ciudad en ocasión del Bicentenario y pidieron dejar de lado las diferencias para los festejos patrios.

La diputada del peronismo disidente Graciela Camaño dijo que siente "vergüenza ajena" de que los argentinos tengan que "tolerar esta comedia de enredos por temas tan menores" entre Macri y Cristina Kirchner.

"Siento vergüenza por este mamarracho. Yo no me siento parte de estos festejos. Nosotros los dirigentes debiéramos estar discutiendo los graves problemas por los que atraviesa la sociedad", puntualizó Camaño en declaraciones a la prensa.

Coincidió con ella el diputado Francisco de Narváez, quien dijo que no le "gusta" cómo llega la clase política al Bicentenario, "con egoísmos, peleas y recelos".

"Espero que podamos tomarlo como el principio de un cambio, con mayor patriotismo y confianza. No tengo dudas de que el próximo presidente de los argentinos es aquel que sepa recuperar la esperanza", remarcó el empresario en una visita a Bahía Blanca.

El gobernador del Chubut, Mario Das Neves, remarcó a su turno que "el acto del Bicentenario pertenece a todos los argentinos" y dijo que siente "mucha pena" por las diferencias surgidas entre el Gobierno Nacional y la Jefatura de Gobierno porteña.

"De la historia todos somos parte y me parece que no es bueno lo de la Presidenta", dijo Das Neves, así como también expresó que "no es bueno agraviar por agraviar, como tampoco es bueno que no se haya invitado a los ex presidentes" para los actos del 25 de mayo.

"Más allá de que sí uno levantó la voz más que el otro, no es bueno, por que son fechas donde mínimamente uno tiene que respetar la historia y la mejor forma de respetar la historia es participando", sostuvo Das Neves en Comodoro Rivadavia.