Di María, Mascherano y Fede Fernández, al podio

FEDERICO FERNANDEZ INTENTA FRENAR EL AVANCE DEL COLOMBIANO FALCAO

Angel Di María resultó anoche, en el Monumental de Núñez, el jugador más valioso de la Selección Argentina que, pese al empate en cero ante Colombia, sigue encaminada para clasificarse para la próxima Copa del Mundo a jugarse en Brasil.

La actuación de los jugadores argentinos se puede sintetizar así:

Sergio Romero (6): En general tuvo poca tarea, y las pelotas cque le llegaron las supo resolver con criterio.

Pablo Zabaleta (6) : El lateral subió con criterio pero falló a la hora del pase final. Se debatió, eso sí, con mucho entusiasmo sin olvidar su misión de marca.

Federico Fernández (6) : Impuso su vigor físico y buen timming. Importante también en el juego aéreo. Otro de los que cumplió bien con su cometido.

Ezequiel Garay (5) : Lástima la amonestación que lo dejará fuera del partido ante los ecuatorianos, muy importante para la Selección. En general estuvo correcto aunque, al comienzo, le costó asentarse. Luego sí, formó un frontón con Fernández. Salió a pegar demasiado lejos y se ganó la amarilla.

Marcos Rojo (5): Zuñiga lo desbordó con demasiada facilidad. Y perdió un gol increíble. Con el arquero vencido cabeceó a metros del arco y la tiró por arriba del travesaño. Trató de ser salida por su lateral.

Lucas Biglia (5): Más cerca de Mascherano para la marca que involucrado en la creación. Se lo extrañó a Fernando Gago en esa posición.

Javier Mascherano (6 ): El ayer capitán intentó estar en todos lados para cortar y presionar. Solo no puede con todo. Por eso muchas veces llegó a destiempo y, con el paso de los minutos, perdió presencia.

Angel Di María (7) : El mejor, pero por lo realizado en la primera parte del partido. Explosivo para sacarse gente de encima y con pases gol como a Higuaín, que neutralizó Ospina. Luego se aceleró y chocó más de lo que jugó.

Walter Montillo (5) : Fue el que más quiso jugar en corto, pero pareció perdido en lo que buscaba Argentina en ataque. No pesó.

Sergio Agüero (5 ): Después de la roja a Higuaín realizó un desgaste físico que sintió en el segundo tiempo. Errático, pero compensó desde la entrada de Messi. Le anularon mal un gol por un offside de Messi que no existió.

Gonzalo Higuaín (4): Fue expulsado en el primer tiempo por responder a una infracción del colombiano Zapata. Ospina le sacó un mano a mano y luego un remate debajo del arco.

ENTRARON

Lionel Messi (6) : En el segundo tiempo pudo levantar a un equipo que desperdició las que tuvo y se quedó con un empate con sabor a poco en el Monumental. Lío apenas entregó unas pocas grageas de su fútbol y se diluyó con el correr de los minutos. Siempre seguido de cerca por la celosa marca de la camiseta amarilla que tuviera más cerca, le costó hacerse del juego y escapar a los anticipos de sus marcadores.

Devolvió la explosión en los últimos metros con sus corridas y pases profundos. Se fue apagando, al igual que las ilusiones de quebrar el 0-0.

Ezequiel Lavezzi (-) : pocos minutos como para calificar su actuación.

JUGAR SIN LA PULGA

Era cuestión de esperar un poco ayer para calibrar como jugaría la selección de Alejandro Sabella sin Lionel Messi, que asomó en el banco de suplentes.

Así, el equipo blanquicelste salió con su clásico esquema defensivo sumado a Mascherano apenas adelantado a los centrales, con Biglia moviéndose por derecha y Montillo por izquierda, como primeras opciones de pase.

En algunos pasajes ambos colaboraron en ataque, pero siempre tomando más recaudos por la velocidad y el peligro ofensivo que hacía gala en el arranque el conjunto de José Pekerman.

Así, Angel Di María se movilizó por derecha, en esa posición que le inventó Mourinho en el Real Madrid.

Unos metros más adelante estuvo el Kun Agüero moviéndose por todo el ancho de la cancha y con Higuaín (los 30’ que estuvo en cancha) como referente de área.

El volante fue lo más peligroso en ataque. Con Zabaleta como socio en la derecha lastimó a una defensa que dio espacios. Sin opción de pase, Di María eligió la maniobra individual, también intentó lastimar por el medio, asociándose allí con Agüero. El Kun peleó mano a mano con Yepes y Sánchez (con la expulsión de Zapata, el volante pasó a jugar de central) y sufrió ese desgaste ya que terminó el primer tiempo con algunas molestias físicas. Cuando jugó, el Pipa fue el referente del área y quien contó con las más claras de la Argentina en la primera parte. En el segundo tiempo, con Messi en cancha , la selección tomó el esquema habitual. La Pulga se paró unos metros más atrás de Agüero, en el centro de la cancha, con la marca personal de Mejía (ingresó después de la Pulga, para ser su relevo). A medida que pasaron los minutos fue cambiando con Di María, sorprendiendo a veces por derecha. Buscó pararse metros más atrás para liberar espacios, por estar siempre acompañado de la marca personal, pero tampoco dio resultados.