Sacrifican al perro de la enfermera española infectada

EL PERRO EXCALIBUR, QUE FUE SACRIFICADO AYER EN MADRID

El perro de una enfermera española infectada por el virus del ébola fue sacrificado ayer por decisión de las autoridades del gobierno regional de Madrid. Su eutanasia provocó manifestaciones de defensores de los animales frente al domicilio de la paciente.

El animal, llamado Excalibur, presentaba “un posible riesgo de transmisión de la enfermedad al hombre”, afirmó el gobierno regional, en un comunicado, poco después de su evacuación del domicilio de la paciente. “El animal fue sedado previamente para evitar su sufrimiento”, agregó.

El servicio de Sanidad del gobierno madrileño se justificó explicando que los perros pueden ser portadores del virus sin mostrar síntomas de la enfermedad. “En consecuencia, no existe garantía de que los animales infectados no eliminen el virus a través de sus fluidos orgánicos, con el riesgo potencial de contagio”, indicó.

La dueña del animal, Teresa Romero (44), fue internada el lunes en un hospital de Madrid tras dar positiva la prueba para el virus del ébola, convirtiéndose en la primera persona contaminada fuera de África. Formaba parte del equipo médico que había tratado a dos curas misioneros españoles repatriados de África, que fallecieron por la enfermedad el 12 de agosto y el 25 de septiembre respectivamente. Romero se habría contagiado al tocarse la cara con un guante en el hospital.