Engañan a gestora y la asaltan en su casa

LOS LADRONES REVISARON LA HABITACIÓN DE LA VÍCTIMA HASTA QUE ENCONTRARON PLATA. OCURRIÓ EN UNA CASA DE LA LOMA

Trabajos de investigación mediante, que estuvieron facilitados por un supuesto entregador, dos delincuentes concretaron un engaño que les sirvió para perpetrar un robo en La Loma. Para llevarlo a cabo, la mentira de los ladrones duró alrededor de nueve horas.

El lunes al mediodía, a una gestora de 65 años la llamó un desconocido para indicarle que luego iría a su domicilio para realizar un trámite vinculado con la transferencia de un auto, al parecer inexistente.

Ante la consulta de EL DIA, la propia damnificada aseguró no recordar si ese hombre dijo llamar de parte de un conocido en común.

Las horas pasaron hasta que a las 20.30 dos sujetos de al menos 30 años tocaron el timbre de la casa de la víctima, en 25 entre 33 y 34.

“Les abrí creyendo que era verdad lo que me habían dicho. Me venían ‘trabajando’ desde temprano”, admitió la víctima, quien pidió no ser identificada.

Todos entraron hasta que uno de los hombres sacó un arma, le ordenó a la mujer que se quedara quieta y volvió a guardar la pistola.

“sabian lo que buscaban”

Si bien los asaltantes revisaron distintos sectores de la habitación de la damnificada, no tuvieron inconvenientes para dar con el sitio en el que había plata.

Fuentes policiales estimaron que eran alrededor de 1.500 pesos. “Más de esto no te queremos robar”, escuchó la gestora que le decía uno de los ladrones.

Durante pocos minutos más los delincuentes permanecieron en el inmueble. Sólo se llevaron ese dinero y un celular.

Aterrada por el momento que le tocó atravesar, la víctima estuvo un tramo sin entender lo que le había pasado. Para cuando pudo pedir auxilio y la Policía fue a ver qué había pasado, los asaltantes ya estaban lejos.

Aparentemente no hay ningún testigo que haya detectado en qué se escaparon.

Sin embargo, existen indicios que podrían ayudar a rastrearlos. En primer lugar, “se harán cruces de llamadas para identificar al número desde el que llamaron a la víctima”, señaló una fuente de la investigación.

La pesquisa se completará con la revisión de las cámaras de seguridad aledañas al lugar del hecho, más lo que puedan haber recogido los peritos de la Policía Científica que trabajaron allí.

Sobre la base de lo que la propia víctima escuchó de boca de los ladrones, se afianza cada vez más la teoría de que hubo un entregador que dio las instrucciones precisas.