Davis: Argentina e Israel empatan 1 a 1 tras primera jornada del repechaje

El equipo argentino de Copa Davis y su par de Israel empatan 1-1 tras la primera jornada de la serie repechaje que se juega en Sunrise, Estados Unidos, debido a que el correntino Leonardo Mayer cumplió con las expectativas y le ganó al juvenil Bar Botzer, pero Carlos Berlocq cayó con Dudi Sela.

Mayer, 25 en el ranking mundial, trabajó más de lo esperado pero dio el primer paso del equipo capitaneado por Martín Jaite en busca de la permanencia en la elite al ganarle a Botzer (776) por 6-4, 3-6, 6-2 y 6-1, mientras que Berlocq (67) no logró tomarse desquite de la reciente caída en el Abierto de Estados Unidos y volvió a perder con Sela (84), otra vez en cuatro sets, por 6-3, 6-7 (5), 6-2 y 6-2.

El traspié del chascomunense puso un manto de dudas sobre las aspiraciones argentinas ya que la pareja de dobles israelí que integran el porteño Jonathan Erlich y el uruguayo Andy Ram tiene mucha experiencia y será un duro escollo mañana para Horacio Zeballos y Federico Delbonis, y porque el buen nivel que exhibió Sela es una amenaza para Mayer en el cuarto punto del domingo.

Por eso Jaite, quien en la calurosa ciudad estadounidense capitanea por última vez al equipo argentino, se retiró del Sunrise Tennis Club con un sabor agridulce debido a que el 1-1 pone en peligro la permanencia argentina en el Grupo Mundial, lugar que ocupa desde 2002.

Lejos de Tel Aviv, que había sido la sede propuesta por la federación israelí, pero fue rechazada por la ITF debido al sangriento conflicto en la Franja de Gaza, unos pocos cientos de hinchas se acercaron al estadio montado en el pintoresco club de la ciudad cercana a Miami.

Mayer jugó muy por debajo de su nivel actual y sufrió más de la cuenta, pero le dio el primer punto al equipo ante un desconocido Botzer, que debutó hoy en la competencia y habitualmente juega torneos Futures.

La responsabilidad de ganar debido a la diferencia de jerarquía entre ambos fue una mochila por momentos muy pesada para Mayer, a quien todo parecía costarle más de la cuenta.

Los errores no forzados que se repitieron desde el comienzo del partido fueron minando la confianza del correntino, que mostró su peor cara en el segundo set.

Mayer ganó el primer parcial 6-4 y quebró el saque de Botzer en el quinto game del segundo set, pero los nervios por los errores que se repetían lo desenfocaron y el israelí lo aprovechó para recuperar el quiebre en el sexto, quedarse con otro game de saque de Mayer en el octavo y después cerrar el parcial 6-3.

Con mucha bronca el correntino se tomó unos segundos de más, fue hasta el vestuario para cambiarse la ropa debido al intenso calor y cuando regresó a la cancha lució más tranquilo y se pareció bastante al que ocupa el puesto 25 del escalafón mundial.

El tercer y el cuarto set mostraron la diferencia entre ambos. Botzer no consiguió sostener la intensidad de Mayer y el correntino jugó cómodo y lo desbordó cada vez que se lo propuso.

Fue un 6-2 y 6-1 que se parece más a lo que todos esperaban del encuentro, aunque Mayer y el capitán Jaite habían alertado sobre que "en Copa Davis siempre se pueden dar resultados inesperados".

Si a Mayer le costó el debut, mucho más difícil fue para Berlocq, quien luchó hasta el final, pero cayó luego de tres horas y 20 minutos ante un Sela que mostró pasajes de muy buen tenis y jugó con lucidez los puntos más importantes del encuentro.

Apenas se habían jugado tres games cuando la lluvia, que había amenazado durante todo el día, obligó a la suspensión momentánea del partido. El juego se reanudó más de una hora después y Sela rápidamente logró capitalizar sus oportunidades y se llevó el primer parcial por 6-3 tras quebrar el saque del chascomunense en el sexto game.

El escenario fue aún más negativo para Berlocq cuando Sela tomó ventaja de 3-0 y con dos quiebres en el segundo set. Pero el argentino, fiel a su estilo combativo, logró recuperarse gracias a un juego agresivo que incomodó a Sela, llevó el parcial al tie break y lo ganó por 7-6.

Ese fue un envión anímico tremendo para Berlocq, que parecía dispuesto a vender muy cara su derrota. Pero Sela volvió a mostrar su mejor versión, jugó con enorme fluidez y se quedó con el tercer y el cuarto set por 6-2, ante la impotencia de un Berlocq que ya no encontró respuestas y apenas saludó a Sela en la red se retiró rápidamente al vestuario.

La serie está abierta, pero los israelíes sueñan con dar la sorpresa y depositan su confianza en la experiencia del dobles, mientras que el equipo argentino todavía cuenta con buenas posibilidades, pero lamenta haber dejado escapar la posibilidad de terminar el primer día a un paso de la tan ansiada permanencia