El coleccionismo, un valioso hobby en expansión

Foto: Museo de la Soda (Facebook)

Como cada 7 de enero, hoy se conmemoró el Día del Coleccionista, fecha que reconoce el esfuerzo de muchas personas por rescatar piezas que además de aumentar sus colecciones, brindan, entre otras cosas, una valiosa información de usos y costumbres de otras épocas.

Según afirman quienes tienen la afición de juntar objetos de una misma categoría, en La Plata, Berisso y Ensenada hay miles de coleccionistas. Todos coinciden que el hobby se vio favorecido por la aparición de internet y la posibilidad de cambiar piezas con gente de diferentes lugares.

Luis Taube, presidente del Club Coleccionista Platense y responsable del Museo de la Soda, asegura que solo en su entidad hay casi medio centenar de socios que se dedican a reunir piezas de las más variadas temáticas.

Lechuzas de cerámica, rosarios, almanaques, jarras de pingüinos, todo tipo de artículos con el personaje de Alicia en el País de las Maravillas, zapatos en miniatura o vasos, son algunas de las colecciones que tienen los integrantes del Club de Coleccionistas.

En algunos casos, el amor por determinados objetos se despertó casi por casualidad. Ese fue el caso de Taube que un día descubrió que en una chatarrería de Berisso iban a desguazar sifones antiguos. “Era fines de la década de los 80 y en ese lugar iban a romper los sifones para vender por un lado las cabezas de plomo y por el otro, las botellas de vidrio; hablé con el dueño de la chatarrería y le empecé a pagar $2 por cada envase”, afirma.

Taube descubrió un día que había reunido miles de sifones - en la actualidad tiene 4 mil -, eran envases de todas las capacidades, formas y soderías. Entonces le propuso a su familia salir de excursión por las rutas 29 y 2 para entrar en cada pueblo y buscar envases en las chatarrerías y en las soderías, sitios en los que cosechó parte de ese peculiar patrimonio.

Fue así que el 13 de noviembre de 2001 fundó el Club del Sifón con la intención de conocer gente con gustos afines y el 26 de abril de 2003, abrió las puertas del Museo del Sifón, ubicado en 60 y 128, donde exhibe una variada colección.

Los coleccionistas coinciden en que este hobby creció de manera notoria en los últimos 10 años. El abanico de colecciones es tan variado como la imaginación y el gusto de quienes encuentran particularidades en objetos que para muchos pasarían desapercibidos.

Por caso, el abogado Juan Carlos de Marco confiesa que en poco tiempo se mudará a una casa más grande para poder disfrutar de sus 35 colecciones con objetos nacionales y de otros países.

Entre otras piezas tiene 60 mil posavasos y 1.800 pins de cerveza; 1.500 prendedores de solapa de cerveza; 600 botellas de cerveza de aluminio; 250 jarras de cerámica de Budweiser; 3.000 palillos mezcladores de tragos; 150 chapas cubre corcho de champagne de Argentina; 80 pins de los Beatles; calcomanías de todas las fiestas del ternero de Ayacucho desde 1969 a la fecha.

A raíz de su pasión por Gimnasia también guarda tapas de la revista El Gráfico en las que aparecieron jugadores del club y todo tipo de objetos vinculados a la institución.

“Los coleccionistas platenses hemos crecido enormemente en los últimos tiempos, participamos de encuentros y nos vinculamos e intercambiamos piezas”, afirma el coleccionista.

En la misma línea, Jorge Rau, titular del Museo del Automóvil - 1 entre 34 y 35 - afirma que hay más coleccionistas que nunca y que a él siempre le gustó reunir objetos grandes como los autos: “Es un problema porque se necesita mucho espacio y eso constituye es una traba”.

Su primera colección fue de autos de juguetes y bolitas. “Todavía los conservo en una vitrina, son los mismos con los que jugaba en las pistas de tierra que armábamos en el fondo de la casa en la que crecí, en 54 entre 15 y 16”, sostiene Rau