Pensando en verano

D esde el cristal de Murafgno en un turquesa opalino hasta la belleza de una mariposa Morpho en pleno vuelo en América del Sur, el azul índigo transmite una vitalidad que no toda su gama cromática contiene.

Además de tranquilidad y conseguir un ambiente en armonía, el azul es un color vital, un neutro con fuerza que en complementos o formando parte de la decoración más intemporal resulta atractivo en cualquier estancia.

La interiorista británica Katharine Pooley define como auténtica su obsesión por el detalle, de ahí que sugiera emplear diferentes tonalidades de esta gama para añadir sofisticación y presencia a una combinación neutra.

Señala que los linos neutros sirven para suavizar y equilibrar la atmósfera y comenta en el libro “El color de tu casa”, de Stephanie Hoppen, que el toque de marrón chocolate evita que choquen la intensidad azulada con las más pálidas.

Se trata de un tono hondo, profundo, ideal para decorar los dormitorios, pues ofrece el sosiego y la paz que se requiere en un ambiente de descanso.

EN AZUL Y BLANCO

El índigo es uno de los colores de la nueva temporada y nos devuelve al color del mar, al azul intenso del cielo en la decoración de paredes, textiles y complementos.

Las empresas textiles referentes han concentrado en este color algunas de sus colecciones.

“Se trata de una colección con un claro espíritu estival y colorido de plena actualidad”, dicen los responsables de una importante firma inglesa y añaden que es un color asociado al Mediterráneo, a su calidez y por lo tanto resulta atractivo en cualquier lugar y ambiente.

Un color lleno de matices que resulta ser “el tinte más utilizado en Europa desde la Antigüedad”. Las propuestas abarcan el espectro de los lisos con los estampados florales, en rayas y cuadros ensamblados por el crudo lo que realza su intensidad.

La tela de cortina con hojas bordadas en azul sobre lino blanco ofrece un aspecto rústico para un ambiente muy eco que tamiza la luz que cruza del exterior al interior.

MOSAICOS Y JARRONES

Otras empresas apuestan por el azul en detalles como jarrones y mosaicos.

Jarrones colgantes y de estilo dolomita en vidrio templado, se hacen un hueco entre cerámicas cuarteadas para suelo y repisas generosas.

Para aquellos que solo deseen innovar el color que luce su pared, hay firmas que apuestan por una paleta en la que el índigo también es el protagonista absoluto. Según los responsables, el azul añil es un color asociado a la “sabiduría, la honestidad y la tranquilidad”, un tono que realza la habitación en la que se encuentre.

Como la pared no solo es pintura, la propuesta de los especialistas en papel pintado se inclinan también hacia el azul índigo e incluso más intenso. Con un fondo en ese tono y cuajado de inmensas flores se atreven a presentar un salón con un sofá en terciopelo azul, sillas de hierro de jardín y cojines de tapicería idéntica a la pared. Una arriesgada apuesta que funciona a la perfección.

Más moderno y contemporáneo, en una textura rica y una gran calidad, algunas colecciones ayudan a ampliar el espacio, resultando muy atractiva para lugares abiertos gracias a sus líneas horizontales que difuminan el color con una pequeña densidad de blanco.