Un vecino se ahogó al caer en un pozo en 68 y 119

Un hombre de 58 años murió ayer en el barrio El Mondongo, dentro de un pozo lleno de agua ubicado frente a una de las puertas de su casa. Según informaron voceros policiales, Solonides Villarreal perdió la vida en las primeras horas de la mañana, presuntamente ahogado tras caer en una excavación en la que él mismo habría estado trabajando.

El pozo, que fue escenario de la tragedia, está ubicado a la altura del número 1753 de la calle 68, entre 118 y 119. Allí, el acceso a un pasillo lateral de la casa que habitaba Villarreal está retirado un par de metros de la línea de construcción municipal. El sector, cubierto de pastizales y lindero al cerramiento de una obra en construcción, forma virtualmente parte de la vereda.

El vecino, de origen peruano, encontró la muerte en una zanja rectangular de poco más de 1 metro de largo por 50 centímetros de ancho, y unos 20 de profundidad, que en uno de sus extremos tiene un pozo de mayor envergadura. Anoche, en medio de la tormenta, el lugar estaba anegado.

"Lo que suponemos es que Villarreal, que había compartido una cena con familiares por el Día de la Madre, en medio de la oscuridad de la noche calculó mal o no se percató de la cercanía del pozo" explicaron fuentes policiales, desde la comisaría 9º -en cuya jurisdicción se produjo el hecho-: "entonces resbaló, con tanta mala suerte que se golpeó la cabeza y quedó inconsciente en la parte más profunda y llena de agua".

En la mañana de ayer, cuando la hija adolescente de Villarreal salió de la casa para ir al colegio, se topó con un cuadro desolador. "Fue algo terrible" recordó uno de los bomberos policiales que participaron del operativo de rescate del cuerpo: "el hombre estaba cabeza abajo, con la mayor parte del torso sumergida".

Según las estimaciones preliminares de los investigadores -que realizaron las pericias pertinentes en 68 y 119 ante la presencia del fiscal platense Leandro Heredia-, cuando fue encontrado, pasadas las 7 de ayer, Solonides Villarreal llevaba sin vida "entre 6 y 8 horas". Los voceros agregaron que "aparentemente, la zanja la había hecho el propio vecino unos días atrás para solucionar un problema vinculado al sistema de cloacas que venía soportando su vivienda".

QUEJAS POR OTRO POZO PELIGROSO

Vecinos del barrio Hipódromo expresaron ayer su preocupación por la presencia de lo que describieron como "un enorme y traicionero agujero de un metro de diámetro y dos de profundidad" ubicado en 116 y 44, bajo la vereda del Hipódromo de La Plata.

"Cualquier persona que circule por ahí puede sufrir serias heridas o incluso matarse" explicó Fernando Marchione: "el hueco quedó expuesto al romperse la losa -conformada por casetones de vidrio- de alguna construcción subterránea del Hipódromo, que avanza hacia la vereda. Por eso el arreglo no puede esperar".