Asesinan a la cajera de un supermercado en Tolosa

Gritos desesperados, desgarradores. La imagen de la joven tirada en el suelo en medio de un charco de sangre movilizó a todos sus compañeros de trabajo y hasta los clientes que se encontraban en el lugar. Todos sacaron sus celulares y empezaron a llamar al 911 y al 107 en busca de una ambulancia. Lo mismo hicieron los primeros policías que llegaron a cubrir la denuncia. Pero fue en vano: la chica ya estaba muerta. Un certero disparo que le entró por el ojo derecho y, le destrozó la cabeza, terminó en segundos con su vida.

Conmoción, bronca, dolor. La inseguridad otra vez fue sinónimo de tragedia en nuestra ciudad.

El salvaje episodio ocurrió en la sucursal de la cadena de supermercados "Vea", ubicada en la calle 525 entre 8 y 9, donde al cierre de esta edición trabajaban peritos de Policía Científica en busca de algún rastro de los delincuentes, que serían 4 y que habrían alcanzado a escapar con una importante cantidad de dinero.

La víctima, cajera de ese local, fue identificada por la Policía como Soledad Acosta, de 32 años, quien al menos tenía dos hijos chiquitos y vivía en el barrio Aeropuerto.

Se trató de la tercera persona que es asesinada en lo que va del año en asaltos a comercios.

Como se recordará, la fatídica lista comenzó en un almacén del barrio Cementerio y siguió en una veterinaria de La Loma.

ENCAPUCHADOS

Según pudo saber este diario de fuentes policiales, el sangriento asalto quedó registrado en las cámaras de seguridad del supermercado. Y allí, claramente, pudo observarse cómo un ladrón encapuchado, que estaba junto a Acosta mientras ésta le entregaba el efectivo, separó su mano del cuerpo, unos 30 centímetros, para después jalar el gatillo del arma que empuñaba en clara señal intimidatoria.

Nadie se explica por qué semejante agresión, ya que no habría existido ningún tipo de resistencia.

Después, tras el estampido, y la cajera mortalmente herida, el comercio se llenó de gritos de espanto, corridas y abrazos interminables.

La chica nunca respondió a los estímulos de sus compañeros y, cuando finalmente arribó la ambulancia, tras largos minutos de demora, ya era demasiado tarde.

Allí quedó, al costado de su caja, envuelta en una frazada, mientras los peritos y, las más altas autoridades policiales de la Ciudad, comenzaron a caminar con gesto adusto y en busca de datos para atrapar a los homicidas.

EN MOTO

Al parecer, siempre en base al reporte oficial, habrían sido cuatro los asaltantes, pero sólo se vieron a dos de ellos dentro del amplio salón de ventas, que a esa hora, cerca de las 21.00, estaba atestado de clientes.

Precisamente, la fuga, al menos de los que oficiaron de "campana", se concretó en una motocicleta. Pero no hubo más datos.

Los fiscales Leila Aguilar y Juan Cruz Condomí Alcorta supervisaron en persona la tarea de los efectivos, bajo las órdenes del capitán Raúl Díaz, titular de la seccional sexta.

También estuvieron el comisionado Juan Carlos Ghillino, jefe de la Departamental local, y el inspector Adrián Virginio, de la Distrital City Bell, así como personal del gabinete de Homicidios de la DDI La Plata, que anoche trabajaba con las primeras declaraciones de testigos presenciales del homicidio.