Asalto y golpes en una casa de quinteros en Etcheverry

Una auténtica odisea tuvieron que vivir siete integrantes de una familia de quinteros de Etcheverry, anteanoche, luego que al menos seis delincuentes -cuatro de ellos encapuchados- ingresaran a una vivienda de esa zona con fines de robo. Luego de reducir a sus víctimas con varias armas de fuego, se apoderaron 100.000 pesos en efectivo, a la vez que sustrajeron al dueño de casa una camioneta modelo 2010, en la que cargaron varios electrodomésticos y diversos objetos de valor.

El ataque se registró a las 20.30 del viernes último en una casaquinta de calles 223 y 40, donde durante las tres horas en que el grupo de ladrones permaneció en ese domicilio obligó a uno de los hijos de ese inmueble a trasladarse con parte de la banda a su vivienda, distante a escasos metros de donde dieron el golpe, despojándolo de 1.500 pesos y otras pertenencias.

Los delincuentes actuaron con inusitada violencia contra algunos de los damnificados. Al dueño de casa, José Antonio Derkacz (68), y a uno de sus hijos mellizos, Julio (35), les desfiguraron sus rostros a trompadas y patadas.

SIN ESCRUPULOS

No fue todo: tomaron de los cabellos a Mirta Beatriz Gallo (27), nuera del dueño de casa y embarazada de 8 meses; a una nieta de 10 años uno de los delincuentes le dio un cachetazo en la cara y la amenazaron con secuestrarla llevándola a Paraguay para allí pedir un rescate.

También golpearon a otro de los hijos de Derkacz, Miguel (35), con un palo de hockey en las piernas y amagaron con cortarle una oreja. Siempre en su afán de intimidar para obtener más dinero, además rociaron con gasoil parte de la vivienda, advirtiendo que la incendiarían, y causaron serios destrozos en placares y taparrollos.

Inclusive hasta se tomaron un tiempo para abrir la heladera y cenar alimentos como tallarines, porciones de pizza y huevos fritos.

ROBAN CAMIONETA Y HUYEN

Ayer, a horas del brutal asalto, José Antonio Derkacz, acompañado por su esposa Rosa Kubiscen (65), sus dos hijos mellizos, su nuera, y por sus nietos, la nena de 10 y un nene de 7 años, todos presentes al momento del ataque, contó a este diario que "estos delincuentes llegaron en una camioneta cuando estábamos en el parque de la casa tras haber cenado. A los gritos y con armas de fuego en las manos nos hicieron entrar a la casa. Y ahí empezó nuestra pesadilla".

El hombre, oriundo de Misiones y que lleva 40 años de actividad en Etcheverry como quintero, hizo saber luego que "al margen de golpear a mi hijo Julio y a mí, como también lo hicieron después con mi hijo Miguel, nos encerraron en el baño y lo mismo hicieron después con el resto de la familia. Pero como algunas de las mujeres ya casi no podían respirar por ser tantos en un espacio reducido, las llevaron luego a una pieza".

Asimismo, señaló que "ya con la plata que robaron a Julio y a mí en su poder, cargaron otras cosas que nos sacaron, como electrodomésticos, una bicicleta, una motosierra, una máquina de coser, otra de cortar pasto y dos armas de fuego en mi camioneta Chevrolet S-10 blanca, que tiene sólo ocho meses. Luego huyeron".

Por último, Derkacz recordó que "hace algo más de 10 años me habían entrado a robar cuando dormíamos, pero ingresaron al galpón de la quinta y se llevaron mercaderías y herramientas. Y hace dos años se metieron acá también de madrugada y sustrajeron 1.500 pesos. Pero no se mostraron violentos como los del viernes. Qué va a hacer, 40 años de trabajo, de lucha, para terminar golpeado y robado junto a mi familia".