Dan la sentencia por la salidera salvaje a Piparo

CAROLINA PIPARO RECLAMÓ UNA CONDENA EJEMPLAR PARA TODOS LOS ACUSADOS DE LA SALIDERA SALVAJE. HOY SE SABRÁ SI PARA EL TRIBUNAL II DE LA PLATA LA MUERTE DE SU HIJO FUE UN HOMICIDIO O UN ABORTO

El veredicto final. Tras más de dos meses de intenso debate en los tribunales penales de La Plata, donde se escucharon distintas posturas, tanto del fiscal de juicio, como el particular damnificado y las defensas de los siete imputados, hoy se conocerá la sentencia por el salvaje ataque que Carolina Piparo sufrió en julio de 2010 en el barrio La Loma, el cual provocó gran conmoción a nivel nacional.

La mujer, que estaba embarazada de nueve meses, fue blanco de un brutal asalto a la salida de un banco y producto de ese hecho recibió un disparo en la cara, que obligó a que le practicaran una cesárea de urgencia.

Sin embargo, el bebé que gestaba, Isidro, sólo resistió una semana de vida.

La audiencia está prevista que comience a las 11, en el edificio judicial situado en la calle 8 entre 56 y 57.

Allí, los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal II de nuestra ciudad, Claudio Bernard, Liliana Torrisi y Silvia Hoerr, darán a conocer su veredicto en el juicio, que llevan a cabo desde el 4 de marzo pasado.

“Tengo fe de que les den a todos prisión perpetua”, dijo Carolina durante la última audiencia de alegatos

La mujer afirmó que durante el juicio debió “escuchar barbaridades, como por ejemplo, que Isidro nunca existió”.

Piparo se refirió así a uno de las cuestiones que deberá determinar el Tribunal: si puede calificar de “homicidio” la muerte del pequeño.

La fiscalía y el particular damnificado sostienen que se trató de un homicidio, ya que la hipoxia que sufrió Piparo a raíz del disparo ocasionó que el bebé naciera sin signos vitales y tras ser reanimado, sólo pudo sobrevivir una semana.

Sin embargo, la defensa de los siete imputados alegó que se trató de un aborto y que el niño nació muerto y, tras ser reanimado, falleció una semana después, a raíz de una sepsis generalizada, por lo que solicitaron la absolución de los detenidos respecto del homicidio.

Piparo, de entonces 30 años, fue baleada el 29 de julio de 2010 cuando con su madre, María Emma Cometta, retiró dinero de la sucursal del Banco Santander Río de 7 y 42 y se dirigió a su casa, en las calles 21 y 36, de La Loma.

Tras apoderarse del dinero y antes de huir, un ladrón le disparó a Piparo en el rostro, lo que motivó que le realizaran una cesárea de emergencia para que diera a luz a su hijo Isidro.

Por el hecho son juzgados Carlos Burgos (20), quien llegó al juicio imputado de ser el autor material, pero luego la propia víctima reconoció como su tirador a otro de los acusados: Carlos Moreno (20).

También son juzgados el acusado de “marcar” a Piparo dentro del banco, Miguel “Pimienta” Silva (43); Luciano López (20), quien manejaba la moto que interceptó a la mujer; Juan Manuel Calvimonte (25); Carlos Jordán Juárez (45); y Augusto Claramonte (44), que se encuentra en libertad por falta de mérito.

GRAVES CARGOS

Los siete están acusados de “asociación ilícita, robo doblemente calificado en concurso real con homicidio triplemente calificado por haber sido perpetrado con alevosía, con el concurso premeditado de dos o más personas y criminis causa en grado de tentativa”.

Además, se les aplicó el concurso ideal con “homicidio triplemente calificado por alevosía, por el concurso premeditado de dos o más personas y criminis causa para asegurar el resultado del delito agravado” por la muerte del bebé.

El fiscal Marcelo Romero pidió reclusión perpetua para cinco acusados (Moreno, Calvimonte, Jordán Juárez, López y Silva) y 15 años de pena para Claramonte y Burgos.

En tanto, el abogado de Piparo, Fernando Burlando, solicitó la pena de reclusión perpetua para seis de los imputados y no acusó a Burgos.

“MI CLIENTE ES INOCENTE”

Por su parte, el abogado Rubén Carrazone, que representa a Carlos Burgos, volvió a decir ayer que su cliente “es inocente”.

“No se ha producido una sola prueba, que logre conmover su relato”, agregó.

En declaraciones a un canal de cable, el letrado se mostró esperanzado de que Burgos no reciba condena.

“Ni por el ataque a Piparo, ni por las otras salideras bancarias, de las que se lo ha acusado sin ningún fundamento”, concluyó.

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