Los “dobles”, desde La Plata a la TV y el cine, con toda la acción y el peligro

ENTRENAMIENTO, DESTREZA Y UNA FUERTE DOSIS DE CONCIENCIA DE ASUMIR RIESGOS, EL COMBO IDEAL PARA LOS DOBLES DE LAS PELÍCULAS

Se preparan para llegar al cine y la TV, pero en este caso no necesariamente como actores o actrices, sino como aquellos que reemplazan protagonistas o artistas de reparto en situaciones peligrosas. En La Plata ya hay una escuela de dobles de riesgo y una veintena de jóvenes trabaja duro para acceder al mundo de las películas, las producciones televisivas y la publicidad, lo que requiere de personas intrépidas, en un estado casi atlético y también con algún demostrado histrionismo.

Nomás con una pelea cuerpo a cuerpo de cierta intensidad, muchas celebridades se retiran del set de filmación para que nombres anónimos los emulen en aspecto físico y vestimenta, pero para eso hace falta, además, poseer como atributo propio la destreza que se necesita para lanzar patadas y golpear sin lastimar a nadie, saber arrojarse desde alturas que espantarían a cualquiera y jugarse el pellejo en medio de explosivos.

La productora Action fue creada hace un año y proveyó ya de “stunts” (dobles de acción) a algunos filmes vernáculos, como “El rastreador”, un policial de suspenso coproducido con Chile que se estrenará en las próximas semanas en el cine San Martín. También aportó para roles de riesgo en “Justicia propia”, un thriller con artes marciales incluidas que protagonizan Juan Manuel Olmedo y Gabriel Almirón.

Hasta ahí llegaron los jóvenes platenses con un entrenamiento que contempla acrobacia, actuación, coreografía de lucha y determinadas técnicas de simulación. Pero la apuesta sube y ahora, una chica del grupo, Florencia Rocca (18), competirá, luego de una primera selección para la que se presentaron 1-500 aspirantes, en las instancias semifinales de un casting de dobles de riesgo para una serie de espionaje que lanzará la cadena de televisión Fox.

“Buscan una chica de mis características, que sea contorsionista y stunts a la vez. Veremos qué suerte tengo; quedamos 20 de distintas partes de latinoamericana y una sola va a ser la doble de la protagonista de la serie”, contó Florencia, quien cumplió con alguna actividad física desde muy chica y ahora practica para hacer del doble de riesgo una profesión.

Aunque en este siglo XXI, por la importancia que ha cobrado el género de acción, los requisitos para los que realizan las escenas de riesgo son más elevadas que antaño y demandan de una mayor especialización, ya no se exige a los dobles, como en otras épocas, tener cierto parecido físico con el artista que va a sustituir. Ahora, ese detalle se resuelve entre la tecnología y el arte. “Lo único que se pide es la capacidad necesaria para asumir la situación de peligro y estar bien entrenado, porque el resto se hace con maquillaje, vestuario y hasta con recursos digitales”, explicó Sebastián Ceratto, a cargo del entrenamiento del grupo.

Federico Sandoval tiene 20 años y estudia cine en la facultad de Bellas Artes. Quiere ser, en unos años, realizador. Transitó ya por espacios cargados de adrenalina, como cuando se prendió al parkour, una disciplina que estuvo de moda y consiste en desplazarse en ambientes urbanos o naturales sorteando los más peligrosos obstáculos. Para el joven, esta nueva actividad lo “recarga” y lo ayuda en su formación como artista. Dos veces por semana aprende a usar armas japonesas, pistolas y cuchillos de madera o de plástico. “Pero lo que me encanta es dar saltos mortales -dijo-. En realidad, todo lo vinculado al cine me llama la atención y esta es una buena manera de acercarse”.