Críticas al nuevo jefe del Servicio Penitenciario

ALEJANDRO MARAMBIO, QUIEN VOLVIÓ A OCUPAR AYER LA JEFATURA DEL SERVICIO PENITENCIARIO FEDERAL. DETRÁS SUYO EN LA FOTO, EL RENUNCIANTE DIRECTOR, VÍCTOR HORTEL

Organismos de Derechos Humanos salieron a cuestionar al designado director del Servicio Penitenciario Federal (SPF), Alejandro Marambio, y reclamaron al gobierno nacional “revisar sus antecedentes”.

Marambio vuelve a ocupar ese puesto, ahora reemplazando a Víctor Hortel, quien renunció tras la escandalosa fuga de 13 presos de alta peligrosidad del penal de máxima seguridad de Ezeiza.

Fue el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel el primero en reclamarle al Gobierno “revisar los antecedentes y la foja de servicio” del nuevo director del SPF, al recordar las acusaciones de torturas en cárceles bajo su anterior mandato al frente de la institución, entre 2007 y 2010.

En esa línea, advirtió que el Ejecutivo “tiene que tener mucho cuidado” porque todavía hay “espacios” fundamentales “por cubrir en democracia” y comparó la situación de Marambio con la del jefe del Ejército, César Milani.

En esa línea, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), que conduce Pérez Esquivel, afirmó luego en un comunicado que la asunción de Marambio como jefe del Servicio Penitenciario “no es una buena señal, sino todo lo contrario”, y reclamó al Gobierno que “reconsidere” el nombramiento e investigue “los casos de tortura y violaciones a los derechos humanos durante su gestión” anterior.

El organismo advirtió además que en ese tiempo “murieron al menos 180 personas privadas de la libertad, según los registros de la Procuración Penitenciaria de la Nación. Además este organismo realizó 600 denuncias penales por torturas en las cárceles bajo su dirección”.

Mientras, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, aseguró no tener por estas horas una opinión formada sobre la designación de Alejandro Marambio como director del Servicio Penitenciario Federal, pero admitió saber que “fue cuestionado por maltratos dentro de las cárceles o alguna actitud no buena”

Sin embargo, el Gobierno a través del ministro de Justicia, Julio Alak, defendió enfáticamente ayer al nuevo jefe del Servicio Penitenciario Federal, a pesar de las críticas de los organismos de derechos humanos.

Además, Alak exaltó la gestión del saliente titular del SPF, Víctor Hortel, y anunció que igual seguirá colaborando con su cartera.

Hortel, en tanto, consideró que la fuga de 13 presos del penal de Ezeiza “es una factura” que le pasan desde adentro de la institución “por el proceso de transformación” que dijo haber implementado.

Finalmente, el Procurador Penitenciario, Francisco Mugnolo, recordó que tuvo etapas de “conflictividad” con Marambio, pero deseó que este retorno “no sea un retroceso” y que se decida “repensar la acción penitenciaria”.