Se abre en el Concejo Deliberante debate por antenas de celulares

LAS ANTENAS DE CELULARES, EN EL FOCO DEL CONCEJO DELIBERANTE

Mejorar el funcionamiento de la telefonía móvil sin provocar un fuerte impacto ambiental es el debate que s e abre por estos días en el Concejo Deliberante local, frente al reclamo de las empresas prestadoras de este servicio, que reclaman la instalación de más antenas en la Ciudad.

Los concejales de todos los bloques políticos vienen manteniendo encuentros con las compañías prestatarias, la Secretaría de Comunicaciones de la Nación (Secom) y técnicos ingenieros de la UNLP, a fin de formarse un panorama completo sobre la problemática.

En ese marco, hay, al menos, cuatro proyectos presentados en ese sentido pero la discusión parece tener todavía mucho camino por recorrer.

Las compañías de telefonía móvil advierten que para lograr que el servicio funcione se requiere colocar “el doble de las antenas” que hoy están emplazadas en la Ciudad, ante la creciente demanda y proliferación de los celulares “inteligentes”.

Como publicó EL DIA en septiembre pasado, las proveedoras afirman que La Plata es una de las ciudades más incomunicadas del país y que se necesitan más infraestructura para enfrentar la demanda y dar respuestas a la crecientes quejas por parte de los usuarios.

La contracara de esta postura se ancla en la resistencia de ONGs, frente a los posibles daños a la salud y al medio ambiente que podrían provocar la potencia de transmisión que emanan las antenas y su sostenida proximidad con la población.

Es más: algunos sectores reclaman establecer una importante disminución de la densidad de potencia, muy por debajo de lo que permite la legislación nacional e internacional.

Sin embargo, los técnicos subrayan que la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que no hay estudios que demuestren tales perjuicios a causa de las ondas que emanan las antenas, y afirman que es “mucho mayor” la exposición que las personas tienen frente a los propios aparatos (teléfonos, Wi-fi, microondas).

En tanto, la Secom, que también expuso frente a ediles platenses de todas las bancadas, impulsa en diferentes municipios la aprobación de una “ordenanza modelo” que permita proveer un servicio eficiente de telefonía, y al mismo tiempo contemple los criterios urbanísticos y la protección de la salud.

Así, en Concejo Deliberante se enfrenta a un dilema: mejorar la comunicación en la Ciudad sin que eso conlleve un impacto ambiental y cuidando la salud de la población.

PROYECTO POLEMICO

Frente a este debate, los concejales de t odas las bancadas se encuentran escuchando los planteos de todos los sectores. Y, en ese sentido, ayer la comisión de Medio Ambiente analizó la presentación del director de Control Urbano, Gustavo Luzardo, apuntada a limitar considerablemente la densidad de potencia entre la población, es decir: la medición de las radiofrecuencias en la vía pública que llegan a las personas.

Según la legislación vigente, las antenas de telefonía móvil no pueden estar próximas a establecimientos educativos, parques y plazas y centros de salud, y deben estar a una altura superior a los edificios que se encuentren en su entorno.

Pero el proyecto en discusión establece un límite de densidad de potencia de 10 microwats, siendo el valor máximo establecido a nivel nacional el de 1.000 microwats. Además de incluri más restricciones, la iniciativa incorpora un control vecinal y de ONGs.

Según Luzardo, con esta importante disminución el servicio podría funcionar porque “así ocurre en Italia, donde se colocan antenas de menor envergadura pero más próximas entre sí”.

No obstante, otras posturas se inclinan porque antenas de mayor potencia pero bien controladas pueden redundar en un buen servicio de telefonía sin perjudicar a la población.

El debate recién se inicia y, hasta ahora, sólo una cosa parecería tener claro consenso: diga lo que diga la legislación futura, los impactos ambientales serán medidos por la UNLP.