Alarma en Abasto por otro caso de hantavirus

LOS VECINOS SE MOVILIZARON AYER Y SE REUNIERON CON EL DELEGADO MUNICIPAL DEL BARRIO

Un nuevo caso de hantavirus que confirmó ayer la cartera sanitaria de la Provincia puso en alerta a los vecinos del barrio San Martín de Abasto, en el que hace tres años falleció un joven a causa de la misma enfermedad.

La persona afectada por el virus transmitido por el ratón colilargo es María Esther Amorido - 29 -, quien vive junto a su esposo y dos hijos de 8 y 12 años en una humilde vivienda de 231 y 515.

El último 29 de noviembre la mujer comenzó con un malestar similar a una gripe y decidió concurrir al Hospital de Melchor Romero, donde quedó internada.

“Estuvo muy mal y le colocaron un respirador que ahora intentan sacarle”, contó Dora Vallejos, suegra de la mujer afectada por el virus.

Si bien la gente tenía la sospecha de que podía tratarse de la misma enfermedad que se cobró la vida de Gastón Ariel Fernández hace 3 años, la confirmación puso el barrio en la calle.

“Las ratas están por todas partes, corren por los cables de la luz, en las calles, se comieron los libros de la biblioteca y están en nuestras casas”, señaló Vallejos.

Como marco del reclamo se observan zanjas obstruidas por pastizales, descampados colonizados por todo tipo de malezas y basura que se acumula en el único canasto comunitario que está en 515 y 231.

RECOLECCION

Según se denunció, la recolección de los residuos es uno de los problemas ambientales que más los preocupa porque pueden llegar a pasar hasta dos semanas sin que se preste el servicio. Entonces se opta por quemar la basura.

“La mayoría guarda las bolsas en su casa hasta tres días porque si las sacás la rompen los perros y es peor; cuando ya no podemos más la quemamos”, dijo uno de los vecinos que ayer reclamó urgentes medidas de limpieza.

Es que en el barrio de cuatro manzanas que crece pegado a distintos emprendimientos hortícolas, el único servicio que hay es la energía eléctrica.

Pese a tener en el historial el fallecimiento de Gastón Fernández por el hantavirus, la gente asegura que nunca se tomaron medidas de higiene que se prolongaran en el tiempo.

“Acá vivimos como hace tres años como si no hubiera pasado nada, apenas murió mi hijo limpiaron algunos yuyos y nos dieron un puñado de veneno, pero ya se olvidaron”, aseguró María Almirón, madre del joven fallecido.

Si bien ayer algunos de los vecinos recibieron un poco de veneno para ratas y la promesa de que se tomarán medidas para controlar la proliferación de los roedores, quienes se movilizaron se mostraron escépticos.

“Esta vez parece que todo va a terminar bien, pero nos preguntamos qué pasará si dentro de un tiempo se enferman nuestros hijos porque nosotros estamos cansados de convivir con las ratas”, dijo Mariela, madre de cinco niños.

En tanto la Municipalidad informó que desde hace una semana se está actuando en la zona de acuerdo al protocolo sanitario que se aplica para presuntos casos de hantavirus. Las actividades incluyen charla con los vecinos, desmalezamiento y recolección de residuos. “Se está trabajando, con tres reuniones por semana”, dijo el vocero comunal.