Los vecinos de Villa Castells preparan un mapa de delitos

PABLO DOTTA, DUEÑO DE UNA PANADERÍA DE 12 Y 500

Fueron muchos los barrios de la Región que decidieron pasar de la queja a la reunión con la Policía para diagramar métodos de prevención del delito. En el caso de Villa Castells, una zona de Gonnet por demás castigada este año y sobre todo en 2013, sus vecinos siguieron adelante y llegaron a la instancia judicial para pedir que se investiguen los distintos robos.

La finalidad que persiguen es que la UFI Nº 9, que se dedica a hacer la pesquisa de los delitos con “autores ignorados”, pueda identificar quiénes fueron los ladrones que protagonizaron esos hechos.

Esta iniciativa, complementaria de los reclamos de mayor patrullaje que empezaron hace un año, apunta a que los asaltantes pasen del anonimato en el que descansan por estas horas para que, una vez individualizados, se los pueda ir a detener, esclarecer los hechos que cometieron y frustrar otros.

“Algunos vecinos expusimos en Fiscalías el escenario que vive Villa Castells por el tema de la inseguridad para que ellos decidan los pasos a seguir”, explicaron en un grupo de Facebook que los nuclea, llamado “Vecinos por la seguridad en Villa Castells”.

Por tratarse de una medida oficial que requiere una documentación de respaldo, “son necesarias todas las denuncias con sus respectivos datos. Si no, es casi imposible hacer una acción en conjunto”, sostuvo uno de los organizadores del grupo, quien destacó que da lo mismo si la denuncia se hizo en la comisaría o en una UFI.

mapa interactivo

Sobre el formato de los planos de Google Maps, cada vecino puede agregar con un punto el lugar exacto en el que ocurrió cada robo, con los datos del horario, la cantidad de ladrones, el arma usada por los delincuentes y también los datos personales de los damnificados, además de “otra información que cada cual crea conveniente”, según indicaron.

Al proyecto aún le falta para concluirlo, aunque cuenta con el “borrador” de otro mapa similar que con papel y lapicera ya se había diagramado hace algunos meses, y que fue presentado a las autoridades de la comisaría de Gonnet.

Por estas horas y teniendo en cuenta la situación más crítica que se vivía en el primer tramo del año, en el barrio hay comerciantes que expresaron estar “más tranquilos” luego de ver un “aumento del patrullaje”.

“El robo callejero, de arrebatos de carteras o chicos a los que los asaltaban cuando caminaban por la calle, bajó bastante, a pesar de que a la tarde la gente sigue tratando de no andar mucho afuera”, evaluó Pablo Dotta, dueño de una panadería de 12 y 500.

“Pero los asaltos en casas, más puntuales, todavía siguen. En los negocios trabajamos con cuidado y muchas veces desconfiando de la gente que simplemente viene a comprar”, lamentó Pablo.