Miguel Angel Marafuschi

Con el fallecimiento de Miguel Angel Marafuschi, la Ciudad despide a un destacado docente y hombre de Derecho que supo transitar una extensa y fecunda carrera tanto en el ámbito de las leyes como el universitario, desempeñándose como decano de la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales en dos oportunidades.

Había nacido en La Plata el 9 de mayo de 1936. Realizó todos sus estudios en establecimientos de la Universidad Nacional de La Plata: los primarios, en la Escuela Anexa, los secundarios en el Colegio Nacional, y se graduó como abogado en la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales.

Enrolado desde muy joven en las filas de la Unión Cívica Radical, entabló un fuerte vínculo con Ricardo Balbín, a quien consideraba su formador. Y defendió apasionadamente el ideario reformista durante sus años de militancia estudiantil en el seno de Unión Universitaria, agrupación a la que representó ante el Consejo Superior de la UNLP.

En 1961 obtuvo el título de procurador y un año después se recibió de abogado. De aquilatada trayectoria en la docencia y en la política universitaria, fue consejero académico, superior y decano de Derecho durante dos períodos.

En el plano docente, fue profesor titular de Derecho Administrativo I y, en el postgrado, director de la Especialidad de Abogados del Estado.

El Consejo Directivo de la casa de altos estudios lo distinguió como Profesor Extraordinario Consulto. Además se perfeccionó con cursos de Defensa Nacional, Geopolítica y Economía y participó de seminarios en los Estados Unidos.

Asimismo, se desempeñó como profesor adjunto de Derecho Privado I en la facultad de Ciencias Económicas de la UNLP; profesor de Derecho Civil III en la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales; y profesor adjunto de Derecho Civil IV en la facultad de Derecho de la Universidad Católica de La Plata.

Su probidad y la solvencia de sus conocimientos le valieron ser profesor invitado de la Universidad de Poitiers, Francia.

En la Fiscalía de Estado de la Provincia fue director entre noviembre de 1962 y septiembre de 1963,y en su extensa trayectoria también figura que fue abogado relator, jefe de departamento y abogado patrocinante en el Banco de la Provincia de Buenos Aires.

Ejerció libremente la profesión de abogado, en cuyo marco se destacó como investigador y conferencista.

Fue vicepresidente segundo de la Fundación Florencio Pérez, donde participó de numerosas acciones solidarias. Además estuvo vinculado al club La Plata Rugby, en el que fue jugador y socio vitalicio.

Referente del comité de la sección Primera de la UCR en tiempos de reapertura democrática, fue asesor del bloque de legisladores bonaerenses del partido y candidato a senador provincial.

Estaba casado con Marina Phillips; de la unión nacieron sus hijos Miguel Angel, Santiago José y Marcelo Ricardo. También tuvo cinco nietos.